Solo hay que comparar la foto de la tribuna de invitados de hace cuatros años, cuando Luisa Fernanda Rudi leyó su discurso de investidura, con la de ayer, en la que el protagonista era el socialista Javier Lambán, para llegar a una sencilla conclusión: en esta ocasión hubo notables ausencias institucionales y muchas más butacas vacías, hasta el punto de dar una imagen realmente desangelada en el graderío ocupado por las autoridades en las grandes citas de la legislatura. Ni los alcaldes de las tres capitales ni los presidentes de las diputaciones de Huesca y Teruel acudieron a la primera sesión de la investidura. Tampoco acudió nadie para representar oficialmente a sus instituciones, salvo en el caso de la DPH, ya que estuvo su vicepresidenta, Elisa Sancho.

La explicación de que una cuarta parte de la tribuna estuviera vacía hay que buscarla en la distribución de las invitaciones entre los distintos grupos parlamentarios y en el uso que le dieron dos ellos, el PP y Podemos. Sus plazas, situadas en los extremos, estaban vacías. El único invitado popular fue el exdiputado y exconcejal Mariano Alierta, que en algunos momentos del discurso cabeceó.

Los alcaldes de Zaragoza, Huesca y Teruel, Pedro Santisteve, Luis Felipe y Manuel Blasco, sí que han confirmado su asistencia a la sesión de hoy, al igual que el presidente de la DPH, Miguel Gracia, que ayer tuvo que ausentarse por una cita familiar y que hoy acompañará a su homólogo en la DPZ, Juan Antonio Sánchez Quero. Sin embargo, la Diputación de Teruel volverá a carecer de representación.

Los que no fallaron a la cita fueron los incondicionales a este tipo de actos. En la primera fila se pudo ver al Justicia de Aragón, Fernando García Vicente; al delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde; a los presidentes de la Cámara de Cuentas y del Consejo Consultivo, Antonio Laguarta y Ramón Salanova, respectivamente; a los senadores autonómicos, el popular Ricardo Canals y el expresidente Marcelino Iglesias. La lista de ‘ex’ estuvo bien nutrida: asistieron los expresidentes de Aragón Hipólito Gómez de las Roces y Ramón Tejedor y tres expresidentes de las Cortes, Antonio Embid, Ángel Cristóbal Montes y José María Mur. No les acompañaron los dos últimos que ha tenido la Cámara, José Ángel Biel y Francisco Pina. Este último no lo hizo hace cuatro años, nada más dejar el cargo.

Nutrida fue la asistencia de parlamentarios en Madrid. Los diputados y senadores socialistas Yolanda Casaús, Ignacio Magaña, Susana Sumelzo, José María Becana, Víctor Morlán y Antonio Arrufat acudieron a escuchar a su jefe de filas, al igual que hizo su compañera en el Parlamento Europeo, Inés Ayala. En medio de ellos, de riguroso blanco, la esposa del que hoy será elegido como presidente, Marisa Lázaro, que no paraba de abanicarse.

El congresista y número dos del PP, Octavio López, compartió bancada con los líderes del PSOE y de CHA en el en el Ayuntamiento de Zaragoza, Carlos Pérez Anadón y Juan Martín. A su lado estuvo el secretario general del PAR, Joaquín Serrano. En la otra punta, el exdirector general de Relaciones Institucionales y crítico del PAR, Javier Allué.

El líder de IU en Aragón, Adolfo Barrena, estuvo acompañado por el diputado nacional de la coalición, Álvaro Sanz, y a su lado se sentó el edil turolense de Ciudadanos Rodrigo Gómez. También estaban dos de sus compañeros de Zaragoza, Alberto Casañal y Sara Fernández.

Los agentes sociales tampoco faltaron a la cita. A la tribuna acudieron el presidente de la patronal, Fernando Callizo; de Cepyme, Aurelio López de Hita, y de la Cámara de Huesca, Manuel Rodríguez, junto a los líderes de UGT y CC. OO., Daniel Alastuey y Julián Buey, respectivamente. Igualmente se pudo ver a los dos rectores, Manuel López (Universidad de Zaragoza) y Carlos Pérez (Universidad San Jorge).