David Mainz, el fichaje de invierno más rentable

El delantero de Sádaba culminó una media temporada que califica "de diez" con cuatro tantos en el ‘play off’ que ayudaron a la SD Huesca a lograr el sueño del ascenso.

David Mainz firma autógrafos a unos niños a la salida de la recepción que le brindó el Ayuntamiento a la SD Huesca tras su ascenso.
David Mainz firma autógrafos a unos niños a la salida de la recepción que le brindó el Ayuntamiento a la SD Huesca tras su ascenso.
R. Gobantes

Si hubiera alguna fórmula matemática para determinar la rentabilidad de un jugador en un equipo, sin duda David Mainz obtendría la puntuación más alta ya que después de llegar a la SD Huesca en el mercado de invierno, logró convertirse en el delantero centro indiscutible (por encima de Esnaider, que llevaba en el equipo desde verano, y de Pallarés, que también llegó en Navidad) y respondió con creces a esa confianza anotando siete goles en la segunda vuelta –algunos de ellos importantísimos– y otros cuatro en los partidos de ‘play off’ que fueron clave para lograr el sueño del ascenso a Segunda División.


"Mi balance es buenísimo porque desde que llegué me salió todo redondo ya que me acogieron muy bien y me adapté enseguida al grupo. Empecé a meter goles muy pronto y luego en el ‘play off’ lo redondeamos consiguiendo el ascenso así que ha sido una media temporada de diez", valora David Mainz sobre su experiencia en la SD Huesca.


Con el paso de los meses, se ha dado cuenta de que la decisión que tomó de abandonar su aventura en el fútbol griego con el AEL Larissa de Segunda División para sumarse al proyecto liderado por Luis García Tevenet fue "acertadísima". Y eso que reconoce que "siempre es complicado llegar a un equipo en enero".


El de Sádaba debutó en la temporada 2004-2005 con el Ejea y hasta ahora ha militado en el Zuera, el Universidad de Zaragoza, La Muela (con el que debutó en Segunda B) y el Eibar, con el que dio el salto primero de la categoría de bronce a la de plata y luego a Primera con un breve paso intermedio por el Club Deportivo Jorge Wilstermann de Bolivia.

"Más emoción" que con el Eibar

Mainz asegura que entre el ascenso que vivió con el Eibar a Segunda en la 2012/2013 y el logrado con la SD Huesca hay "pocas diferencias". No obstante, también confiesa que en esta ocasión quizá ha sentido "algo más de emoción porque he vivido cosas muy malas en poco tiempo". Y es que recuerda con amargura que después de que el Eibar consiguiera el histórico ascenso a Primera el año pasado "me echaron del equipo" y decidió cambiar de aires en el fútbol griego "pero me salió muy mal también". "Así que venir aquí y que me salga esto tan bien supone más emoción porque ves que vuelves a estar en la élite del fútbol", destaca.


El aterrizaje de David Mainz en el equipo no pudo ser mejor. Debutó 15 minutos ante el Real Unión sustituyendo a Esnaider, en el siguiente partido ante el Amorebieta ya disfrutó de 27 minutos, y en los que vinieron a continuación ya jugó prácticamente los 90 minutos. Su estreno goleador llegó en la jornada 23 ante el Barakaldo y su primer y único doblete fue contra la Real Sociedad B, aunque al final sirvió de poco ya que los oscenses perdieron 3-2. También logró perforar las porterías de Leioa, Guadalajara y Socuéllamos. Fueron cinco goles en ocho jornadas, una gran racha. "Vine fuerte y empecé metiendo bastantes goles pero luego tuve un bache, aunque es normal porque si hubiera seguido metiendo goles todas las jornadas estaría jugando en el Madrid", señala con humor.


Y es que no volvió a anotar hasta seis jornadas después, en la goleada a Las Palmas B en El Alcoraz. Su séptimo gol en liga –ante el Bilbao Athletic en la última jornada– fue quizá el más decisivo y por eso no duda en afirmar que de todos los que ha marcado este año, es del que guarda mejor recuerdo. "Me quedo con ese por el minuto que fue, porque era el 85 y en ese momento éramos segundos de grupo; por la forma, ya que arranqué desde más atrás de medio campo; y también porque nos permitió ser campeones y tener dos oportunidades de ascender", resalta.


Mainz llegó enchufadísimo a la promoción, donde logró anotar cuatro goles. El primero fue quizá el más amargo ya que solo sirvió para el honor de meter un gol al Nástic cuando toda la afición de Tarragona celebraba ya el ascenso. En la segunda eliminatoria contra el Racing de Ferrol anotó en la ida y en la vuelta. Y puso la guinda a su media temporada marcando el segundo gol de la tranquilidad al Huracán.


Pese a ese gran olfato goleador, no ha podido alcanzar a los pichichis del equipos, un título que comparten Camacho y Gaspar con 13 tantos cada uno. "Era complicado alcanzarles porque cuando llegué ya llevaban muchos goles. Aunque tampoco hay que mirar esas cosas porque lo importante es el ascenso", dice.

Pocas vacaciones, pero alegre

Pese a que Mainz y el resto de sus compañeros apenas van a tener 20 días de vacaciones, no se queja porque, como se suele decir, sarna con gusto no pica. "Es muy poco tiempo porque casi no da tiempo a que el cuerpo se recupere bien pero como sabes que vuelves para jugar en Segunda, lo llevas con más alegría". Y es que tanto él como otros jugadores de la plantilla han conseguido el premio extra de la renovación por subir a la categoría de plata.


El delantero cree que las aspiraciones de la SD Huesca en Segunda tienen que ser en principio "mantenerse", aunque también advierte de que en función de los fichajes que haga el club "a lo mejor podemos aspirar a algo más". No obstante, ve difícil poder alcanzar el ‘play off’ "porque allí están los equipos grandes". "Todo puede ser, pero es algo muy complicado", subraya.

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