Las ventas de carburantes crecen tras cinco años de caídas

La comercialización crece un 8% en 2015 tras la rebaja del céntimo sanitario pero es un 13% inferior a la del periodo previo a la aplicación.

Imagen de archivo de una gasolinera.
Gasolinera soriana, en una imagen de archivo.
Luis Ángel Tejedor

La comercialización de carburantes comienza a recuperarse tres años después de que la Junta de Castilla y León aplicara el céntimo sanitario, decisión que generó un rechazo prácticamente total en la sociedad. Este impuesto incrementaba en 4,8 céntimos de euro (casi seis sumando el IVA) cada litro de carburante desde marzo de 2012. Ello provocó que las ventas en las estaciones de servicio se precipitaran. Fundamentalmente basado en que el transporte de mercancías repostaba en regiones cercanas sin este impuesto en vigor o en porcentajes inferiores al máximo que se adoptó en la castellano y leonesa. Las gasolineras sorianas acusaron una caída de hasta el 30% que en los casos de las ubicadas junto a otras comunidades se disparó más allá del 40%, según denunció en reiteradas ocasiones la agrupación profesional de la provincia.


La justicia europea asestó en febrero de 2014 un enorme varapalo mediante una sentencia en la que declaraba ilegal el impuesto que durante varios años se aplicó en España (en concreto lo abonado desde el 1 de enero de 2002 hasta el 31 de diciembre de 2012). Lo posterior al 1 de enero de 2013 sí se consideró legal puesto que ya no se aplicaba como impuesto finalista (destinado a la sanidad) sino como un gravamen a los hidrocarburos. Por eso la Junta siempre defendió que Castilla y León era una de las menos afectadas, ya que la aplicación sólo incurría en la ilegalidad desde que se aplicó en marzo de 2012 hasta el 31 de diciembre de ese mismo año, cuyo método de gravamen se modificó.


Al margen de eso, la Junta decidió rebajar el impuesto que le corresponde hasta los 1,8 céntimos por litro. Una determinación que no estuvo exenta de inquietud. La consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, indicaba tras la sentencia europea que el Gobierno regional no se planteaba modificar el impuesto en el año que restaba de legislatura. Unos meses después, en una de sus visitas a Soria, moldeó la afirmación encaminándola a que no se descartaba. Y finalmente la Junta anunció su disminución a partir del 1 de enero de 2015. Es decir, en pleno mandato: a cinco meses y 24 días de la cita con las urnas.


Lo cierto es que la disminución ha conseguido al menos frenar la caída en picado iniciada en 2012 con la entrada en vigor del impuesto. Una situación que no afectó solamente a Soria sino a todas las provincias de Castilla y León. Las estaciones de servicio sorianas y profesionales que dependen directamente del transporte como taxistas o camioneros pusieron el grito en el cielo.


La venta ahora se recupera pero sigue muy lejos de los periodos previos a 2012. La Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores), organismo dependiente del Gobierno central, indica que entre enero y abril de este año en Soria se han suministrado 24.936 toneladas de carburantes como medio de propulsión para vehículos, lo que supone un aumento del 7,7% con respeto a idéntico periodo de 2014, cuando se vendieron 23.146. Y si se compara con 2013, el peor año de la serie histórica, el balance ha mejorado por encima del 23% al pasar de 20.145 a 24.936 toneladas.


Pero los registros todavía están alejados a los previos a 2012. De hecho, de 27.241 toneladas en los cuatro primeros meses de 2012 se pasó a 20.145 un año después. Durante este periodo de 2011, sin el céntimo sanitario en vigor pero ya con la crisis pegando fuerte en Soria, se comercializaron 28.760 toneladas de combustible, frente a las 34.617 de 2008, las 33.071 de 2009 y las 32.872 de 2006. Es decir, que desde 2008, año a la cabeza en ventas, hasta 2015 la comercialización ha caído hasta un 28%.


Por tipos, de las 24.936 toneladas suministradas en el primer cuatrimestre se dividen en 2.721 en gasolina de 95 octanos, 182 de la de 98 octanos y 22.033 de gasóleo A, el que emplea aproximadamente el 80% del parque automovilístico.


En otro sentido, el precio de la gasolina marcó la semana pasada un nuevo máximo anual tras encarecerse por cuarta semana consecutiva, superando ya la cota de los 1,33 euros por litro, según datos recogidos por Europa Press a partir del Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE).Encarecimiento

?Según estas fuentes, el litro de gasolina se había encarecido un 0,52%, superando así el máximo anual de 1,32 euros que marcó la semana anterior. Por su parte, agrega, el gasóleo sumó su tercera semana consecutiva de caídas, tras abaratarse un 0,75% con respecto a hace siete días, y se sitúa en los 1,185 euros el litro, alejándose así más de los máximos anuales de 1,204 euros que tocó en mayo. Además, se acrecienta la tendencia de distanciamiento entre el precio de uno y otro combustible, que marca su mayor brecha desde el año 2007 y cuya diferencia es actualmente de más de 14 céntimos. Según detalla Europa Prees, llenar un depósito tipo (55 litros) de gasóleo es hasta ocho euros más barato que de gasolina.