Contador sueña con el doblete

El líder del Tinkoff inicia hoy la disputa del Giro de Italia, triunfo que aspira a redondear este curso con el Tour de Francia.

Contador posa con el trofeo del Giro de Italia.
Contador sueña con el doblete
Luk Benies/Afp

El español Alberto Contador (Tinkoff) afronta como favorito número uno el Giro de Italia que hoy comienza en San Lorenzo Al Mare con una contrarreloj por equipos, con la intención de sustituir en el palmarés al colombiano Nairo Quintana y dar el primer paso de su gran reto de 2015: lograr el doblete Giro-Tour. "Llego bastante bien de forma y estoy contento, pero en todo caso hay que esperar a la carrera para ver cómo estoy en relación a los rivales", apunta Corredor.


En ausencia de Quintana, Nibali y Froome, el ciclista madrileño acapara las apuestas en la 98ª edición de la carrera rosa, que ofrece, además, un recorrido apto para sus condiciones, con siete finales en alto y algunas perlas en el menú como el Mortirolo. Pero Contador tendrá una dura oposición en su asalto a la segunda maglia rosa.


Vencedor en 2008 y descalificado en 2011, Contador estará arropado en su equipo por ilustres veteranos, como el italiano Ivan Basso –con dos maglias rosas en su palmarés– y el australiano Michael Rogers, además del checo Roman Kreuziger, su hombre fuerte para la montaña.


El de Pinto se presenta después de 40 días sin competir y tras alcanzar un segundo puesto en Andalucía, un quinto en la Tirreno-Adriático y un cuarto en la Volta.


El australiano Richie Porte (Sky), el colombiano Rigoberto Urán (Etixx) y el italiano Fabio Aru (Astana) serán los hombres a batir en la general. El australiano llega lanzado tras ganar la París-Niza, Volta y Giro del Trentino. Será el enemigo número uno. Urán, segundo en las dos últimas ediciones, solo quiere el primer escalón del podio y dispondrá de un potente equipo a su servicio. Por su parte, el joven Aru, tercero en 2014, es la promesa hecha realidad que con los galones del Astana hará soñar a la afición italiana.


Movistar, único equipo español


Otra cosa será la lucha por los puestos secundarios del podio. La lucha se abre a otras opciones. Ahí cuenta el Movistar, único equipo español en liza, con las candidaturas de Ion Izagirre y Beñat Intxausti. El Ag2r presentará al italiano Pozzovivo y el Cannondale-Garmin al canadiense Hesjedal, ganador en 2012.


Por velocidad tendrán mucho que decir el alemán André Greipel (Lotto), el español Juanjo Lobato (Movistar) y los australiano Simon Gerrans y Michael Matthews (Orica), sin olvidar a los italianos Pelucchi, Viviani y Modolo, entre otros.


El recorrido, repartido en 21 etapas con un total de 3.481 kilómetros, incluye siete finales en alto: Abetone (5ª), Campitello Matese (8ª), Vicenza, Monte Barico (12ª), Madonna di Campiglio (15ª), Aprica (16ª), con el Tonale y el Mortirolo, Cervinia (19ª) y Sestriere (20º), con la Finestre.


La decimosexta y vigésima etapas serán cruciales. La primera de ellas, el 26 de mayo, Pinzolo-Aprica de 175 kilómetros, pasará por el Campo Carlo Magno, Passo del Tonale (15,2 km al 6 por ciento y máxima pendiente del 10), Aprica, Mortirolo (12,8 km, desnivel de 1.289 metros, pendiente del 10,1% y máxima del 18%) y Aprica (13,9 km al 3,4% y máxima del 15).


En el Mortirolo, de 2.178 metros de altitud, estará instalada la denominada Cima Coppi, la cima más alta que se ha de subir en una edición del Giro de Italia.


La vigésima etapa, que puede decidir al llegar en el penúltimo día de la prueba con las fuerzas ya muy mermadas, unirá Saint-Vincent con Sestriere, de 196 km. En el recorrido la subida al Colle delle Finestre (18,450 kms, desnivel de 1.694 metros, pendiente media del 9,2% y máxima del 14%), con casi ocho kilómetros de su ascensión será sobre un firme de tierra.


Para contrarrestar las habilidades de los escaladores, la organización ha puesto dos contrarrelojes, la inaugural por equipos, de 17,6 km, y la 14 de Treviso, de casi 60 kilómetros.


El reto de Alberto Contador se inicia con el esfuerzo colectivo de 17,6 kilómetros entre San Lorenzo Al Mare y San Remo. Por delante tres semanas para un sueño. La maglia rosa espera en Milán el día 30 de mayo.