Un experimento con galletas

Se buscan voluntarios para un experimento sobre alimentación, pero, a día de hoy, ya solo hacen falta hombres mayores de 45 años. El resto de plazas están ya cubiertas. Los participantes contribuirán a un estudio del CITA sobre el comportamiento del consumidor ante diversas cajas de cereales y galletas.

Cata de aceite con voluntarios llevada a cabo en febrero.
Un experimento con galletas
Ibercivis

¿Cómo influye en los consumidores el etiquetado de una caja de galletas o cereales? El Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA), del Gobierno de Aragón, y la Fundación Ibercivis van a estudiar cómo se comportan los consumidores ante el etiquetado de los alimentos con un nuevo experimento de ciencia ciudadana en el que se analizarán las preferencias de los voluntarios ante distintas cajas de cereales y de galletas.


Tras su lanzamiento el 18 de mayo, en solo tres días se cubrieron las plazas para mujeres menores de 45 años y apenas quedaban vacantes para hombres menores de 45 y mujeres mayores de 45. Ahora, el perfil buscado es hombres mayores de 45 años, un segmento de la población que se resiste. Las 200 respuestas que se espera recoger servirán para analizar cómo influyen diferentes factores en nuestra decisión final en el supermercado.


Es la tercera vez que ambas entidades colaboran en un experimento de ciencia ciudadana. En febrero, tuvo lugar una cata de aceite en la que los voluntarios debían valorar, tras degustar diferentes tipos de aceite, la relación calidad/precio de cada muestra. Posteriormente, en otro experimento de ciencia ciudadana, se convocó a los voluntarios a formar parte de un estudio de mercado. Consistió en una simulación de compra en la que los usuarios tuvieron que indicar su preferencia ante dos productos similares pero con distintas características. Así, se investigaba cómo las declaraciones nutricionales y de salud relacionadas con la obesidad afectan a la hora de comprar productos.


El experimento que va a realizarse ahora forma parte del proyecto europeo Clymbol, liderado por Azucena Gracia, investigadora del CITA, que busca comprender mejor los efectos de los textos y los símbolos de las etiquetas de los alimentos sobre el comportamiento de compra y consumo.