La DGA deja en el aire las becas de comedores de verano y las de colonias de educación especial

Ya se daba por hecho. En las últimas reuniones, el Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) y Educación habían tranquilizado a las familias con niños en centros de educación especial y les habían dicho que, finalmente, las colonias de verano de sus hijos estarían mejor subvencionadas. También estaba en marcha la apertura de comedores de verano para los menores en riesgo de exclusión. Incluso, se preveía que habría dinero para destinarlo a los hogares con niños pequeños que cobran el Ingreso Aragonés de Inserción (IAI). Todo se iba a financiar a cuenta del fondo contra la pobreza infantil que el Ministerio otorga cada año a las comunidades autónomas, y que este año dejará 1,1 millones en Aragón.

Pero el pasado 24 de mayo, el Ejecutivo pasó a estar en funciones, y todos estos planes, vitales para solucionar urgencias sociales, han quedado en el aire. Las ampas de los cuatro colegios públicos de educación especial que llevan meses luchando para que las colonias de verano sean "accesibles" (seis semanas les van a salir por 900 euros), recibieron ayer la noticia como un jarro de agua fría. Según cuentan, desde el departamento de Menores (IASS) solo les dieron una explicación: de momento, no está firmado y depende de la constitución del nuevo Gobierno.

La misma versión se dio a HERALDO desde la conserjería de Sanidad y Servicios Sociales: "El Ministerio da de plazo hasta el 30 de septiembre para justificar a qué se va a destinar el dinero. Sería irresponsable firmar algo ahora en funciones. Los nuevos gobernantes deberán decidir a qué lo dedican. Por supuesto, la documentación de lo que habíamos propuesto se les va a trasladar", insistieron. No obstante, otras fuentes del Departamento hicieron hincapié en que si la constitución del nuevo Gobierno se dilata en el tiempo, el Partico Popular tomaría la decisión de firmar el documento.

Pero el tiempo juega en contra, al menos en lo que se refiere a los comedores de verano y a las colonias urbanas. En concreto, las portavoces de las cuatro ampas de los centros públicos de educación especial (Jean Piaget, Ángel Rivière, Rincón de Goya y Alborada) manifestaron este viernes sentirse "profundamente defraudadas". "Nos dicen que pidamos la subvención al próximo Gobierno, y que si se concede, ya nos reintegrarán la parte correspondiente cuando se pueda. Pero ahora mismo estamos dando un cheque en blanco. Quienes se apunten, tienen que arriesgarse a pagar 150 euros por semana (la cifra aumentará si sus hijos necesitan cuidados especiales, como fisioterapia) sin saber si luego recuperarán algo", lamentó Mónica Castellano, una de las portavoces.

Otra afectada, María José Ostalé, insistió, de nuevo, en la gravedad de la situación: "Nuestros hijos son niños especiales, necesitan su rutina, no podemos dejarlos al cuidado de nadie o hacer otros planes. Esto no es un capricho y no es justo que nos cueste la semana más del doble que a cualquier otra familia en un centro normal de la red pública", lamentó esta madre.

De momento, las ampas van a enviar un documento a todas las familias explicándoles lo que se les ha comunicado y las opciones que tienen. Son más de 300 en la red pública y hasta 600 en total.

El año pasado

El segundo asunto urgente sería el de garantizar comedores de verano en centros públicos para que los niños con becas durante el curso (aquellos cuyas familias no ingresan ni 7.000 euros al año) puedan seguir haciendo la principal comida del día en condiciones.

Educación llevó a cabo esta experiencia por primera vez el verano pasado, aunque asociaciones de vecinos y partidos como CHA llevan años organizando experiencias de este tipo. El pasado mes de marzo, la consejera de Educación Dolores Serrat (ahora en funciones) ya anunció que el programa se reeditaría. Sin embargo, la incertidumbre es grande: partidos como Podemos han anunciado que cubrir la urgencia social será una prioridad, pero no se sabe qué servicios o programas priorizarán.