Bardenas afronta la campaña de riegos con 40 hm3 menos que en los dos últimos años

El calor y la escasez de lluvias de la primavera, unidos al rápido deshielo, hacen que los agricultores teman por las segundas cosechas.

Los regantes de Bardenas afrontan la campaña de verano con unos 40 hectómetros cúbicos (hm3) menos de reservas que en los dos últimos años. La situación no es preocupante, ya que tanto 2013 como 2014 fueron excepcionales en cuanto a disponibilidad de agua. No obstante, el calor y la escasez de lluvias de la primavera, unidos a un deshielo temprano de la nieve acumulada en la cuenca del Aragón, hacen que los agricultores de este sistema teman por las segundas cosechas –las que se siembran tras recoger los cultivos de invierno–.


"Si hay agua suficiente, una vez cosechados los trigos, las cebadas y las alfalfas los regantes suelen plantar maíz, sorgo, hortícolas o algunas forrajeras. Sin embargo, ahora mismo esas segundas cosechas peligran –explicó ayer el presidente de la Comunidad General de Bardenas, José María Vinué–. La situación no es preocupante, pero sí estamos vigilantes porque, a diferencia de las dos últimas, esta campaña se está complicando".


La temporada de riegos se inició hacia el 15 de marzo. Como todos los años, mientras las reservas del embalse de Yesa han seguido aumentando, los agricultores han tenido toda el agua que han necesitado –en esos periodos el único límite es la capacidad de transporte de los canales–. Sin embargo, a mitad de mayo los responsables del sistema, en coordinación con la Confederación, empezaron a racionar el agua.


"Cuando en el pantano entra menos agua de la que sale se establece un determinado cupo por hectárea, y el problema ha sido que esa decisión la hemos tenido que tomar el 15 de mayo, cuando en un año bueno solemos aguantar hasta mediados de junio", señaló Vinué. El presidente de los regantes de Bardenas insiste en que todavía puede llover, pero subraya que en los últimos días las aportaciones del río Aragón "han sido tan bajas que se parecen a las de un mes de agosto".


Actualmente, el embalse de Yesa está al 82% de su capacidad con 370 hm3, lo que significa que se encuentra algo por debajo de la media de los últimos seis años y almacena 43 hm3 que hace un año.


Además, Vinué recuerda que incluso en una campaña excelente como las dos últimas el déficit estructural de agua que sufre Bardenas obliga a los agricultores a sembrar "más de un 40%" de cultivos de invierno –los de verano son más rentables, pero si se plantaran en todo el sistema no tendrían garantizado el riego–. "Un año más, vuelve a quedar en evidencia la falta de regulación y la necesidad de poner en servicio cuanto antes el recrecimiento del embalse de Yesa", reclamó el presidente de los regantes.

Ayer fue la asamblea ordinaria

La situación actual de este sistema se abordó ayer en la junta general ordinaria que la Comunidad General de Regantes del Canal de Bardenas celebró en Ejea. Esta asamblea, que normalmente se convoca una vez al año, sirvió además para aprobar las normas de reparto de agua de la campaña 2014/2015 y para explicar a los representantes de las comunidades de regantes de base la evolución de las obras de recrecimiento de Yesa.


El nuevo presidente de la CHE, el ingeniero Raimundo Lafuente, estuvo presente en la junta y detalló a los asistentes los trabajos que se están llevando a cabo actualmente y las previsiones para lo que queda de año. "Nos ha explicado que continúan las obras para levantar el cuerpo de la nueva presa y para impermeabilizar tanto la presa antigua como el estribo izquierdo", detalló Vinué, que pidió acabar las obras "cuanto antes".