Zaragoza siempre ha sido clave para los aspirantes a ocupar el Pignatelli, pero ante la incertidumbre electoral la batalla por la capital aragonesa se ha recrudecido tan solo cinco días después del inicio de la campaña. Y Zaragoza en Común, la coalición integrada por IU, Equo, Puyalón y avalada por Podemos, se ha convertido en el blanco de los ataques de todos los partidos. Su irrupción y sobre todo, sus opciones -según las encuestas- de hacerse con la Alcaldía de Zaragoza o de ser decisiva en la política de pactos han desatado duros ataques contra sus miembros y su indefinición.

Pero el martes estos subieron de tono. Fueron la candidata autonómica del PP, Luisa Fernanda Rudi, y el aspirante local, Eloy Suárez, quienes abrieron el fuego, al acusar al cabeza de cartel de Zaragoza en Común, Pedro Santisteve, de no respetar a las víctimas del terrorismo. De esta forma, los populares cambian de objetivo -tras una precampaña centrada en el candidato del PSOE, Carlos Pérez Anadón- y tratan de dar mayor visibilidad a los sectores más radicalizados de Zaragoza en Común para movilizar a sus electorado conservador, poder aludir al voto del miedo frente al bloque de izquierdas y forzar el debate sobre los pactos.Más información en la edición impresa de HERALDO DE ARAGÓN