San Jorge y su dragón saludaron a Don Miguel

Como verdaderos Quijotes. Así celebraron los escolares en las aulas la festividad del patrón de Aragón y el Día del Libro.

Espectaculares ferias del libro, dibujos, cuentos, representaciones teatrales... las actividades desarrolladas en los centros aragoneses con motivo la celebración, el pasado 23 de abril, de la festividad de San Jorge, patrón de Aragón, y del Día del Libro son dignas de mención.


Los chicos y chicas del CEIP Tomás Alvira de Zaragoza organizaron, en el patio del colegio, su IX Feria Solidaria del Libro, en la que no faltó de nada: además de libros, claro, y originales pisapapeles, diseñados por los propios alumnos, hubo payasos, hinchables, cuentacuentos y hasta un divertido espectáculo de magia, protagonizado por el humorista Javi el Mago. Los organizadores dicen que la feria, cuyos beneficios fueron destinados a la Cruz Roja, fue todo un éxito de organización y participación. De manera paralela, los días previos se desarrollaron en todos los cursos actividades y talleres relacionados con la historia de la escritura.


En el Colegio Mercedarias de Zaragoza lo celebraron con unos estupendos marca páginas, realizados por los pequeños de Infantil, y con redacciones en inglés sobre ‘Saint’s George day’ y dibujos, en 3º de Primaria; mientras que en el CEIP Río Ebro cobró especial relevancia la figura de Cervantes. Hicieron un damero, alternando la figura de Don Miguel –en las negras– con portadas de distintas ediciones de ‘El Quijote’ y de otras de sus obras –en las blancas–.


El IV centenario de la publicación de la segunda parte de ‘El Quijote’, en 1615, centró las actividades del IES Avempace, donde el grupo Teatro Avempace, que nació con vocación pedagógica y formado por profesores y exprofesores, puso en escena la obra ‘En un lugar del Quijote’, que fue muy bien recibida por el público estudiantil. "Se trata de un espectáculo –explican los actores– que rememora aquellos aspectos de la vida del ingenioso hidalgo que más merecieron la atención de aquellos que lo trataron. En torno a un brasero imaginario, dan rienda suelta a sus cuitas y preocupaciones, el ama y la sobrina de Don Alonso Quijano, el barbero y el cura, la mujer de Sancho Panza, dos vecinos y el bachiller Sansón Carrasco".