El Gobierno ampliará el Parque de Ordesa solo si cuenta con el respaldo del territorio afectado

La posible ampliación del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, reclamada en diversas ocasiones por los ecologistas, estará supeditada a la aprobación por parte del territorio afectados. Así lo manifestaron ayer los representantes del Gobierno de Aragón y del Organismo Autónomo Parques Nacionales, que asistieron a la reunión ordinaria del Patronato de Ordesa. En ella se informó, entre otras cosas, del nuevo Plan Rector de Uso y Gestión que acaba de ser aprobado y que incluye como una de las directrices a seguir la promoción de la ampliación, "en colaboración con los agentes sociales y administraciones públicas implicadas". El espacio protegido, que en 2018 cumplirá cien años, cuenta actualmente con 15.608 hectáreas. El mínimo exigido en la nueva ley para los Parques de nueva creación es de 20.000.

El Gobierno de Aragón es favorable al aumento de superficie, como lo fue a la conversión en Parque Nacional del Posets-Maladeta, que precisamente se frenó por la oposición vecinal. "Si el territorio lo pide, lo apoyaremos", declaró ayer el director general de Conservación del Medio Natural, Pablo Munilla.

La extensión del área protegida se realizaría por el valle de Bujaruelo, por donde ya se planteó en 1982, aunque finalmente se hizo por los otros tres valles: Añisclo, Pineta y Escuaín. "Había una línea eléctrica que influyó para que no fuera por allí y que sigue estando, pero es evidente que Bujaruelo tiene unas características ambientales muy importantes".

A la reunión del Patronato, presidido por Manuel Pizarro, asistieron también el consejero de Medio Ambiente, Modesto Lobón, y el director del Organismo Autónomo Parques Nacionales, Basilio Rada, exdirector de Ordesa, quien dijo que desde hace muchos años vive "con la ampliación de Ordesa en la cabeza, para mí sería una alegría enorme". Han crecido la mayoría de los parques españoles porque, en su opinión, "deben tener la extensión suficiente para que haya la mínima intervención humana, de ahí que la nueva ley exija un mínimo de 20.000 hectáreas". Aproximadamente la mitad de los 15 espacios de la red nacional tienen una superficie mayor (Sierra Nevada, más de 80.000 hectáreas) y la otra mitad son más pequeños (3.030 ha las Tablas de Daimiel).

Rada destacó que "traen desarrollo al entorno", y como ejemplo puso al pueblo de Torla, que ha cambiado su nombre para incorporar el del Parque (Torla-Ordesa). No obstante, dejó claro que "no vamos a hacer parques contra nadie". Coincidió con Munilla en que la extensión sería sobre todo por el oeste, por el valle de Bujaruelo.

Por su parte, el presidente del Patronato, Manuel Pizarro, recordó que "cuando se ha intentado en Beceite o Posets ha habido división de opiniones". "Hay que hacerlo con paz, la gente tiene que saber que un Parque Nacional tiene muchos privilegios, ya quisiera yo que mi provincia, Teruel, tuviera una atracción de 600.000 visitantes", declaró Pizarro, que también habló de las limitaciones respecto a la caza y otras actividades. "Los primeros que tienen que opinar son los que viven allí", concluyó.

El Patronato estaba convocado para, entre otras cosas, pronunciarse sobre el Plan Director de la Red de Parques Nacionales, que fue respaldado por todos los miembros, salvo por el representante de los ecologistas, que se abstuvo. Mariano Polanco lo justificó porque consideran que abre la puerta a la posibilidad de edificar dentro de esos espacios, la explotación comercial de los nombres o la permisividad de la caza. Por contra, sugirió al Organismo Autónomo la creación de un Parque Nacional en los Monegros para representar el sistema estepáreo y la ampliación de Ordesa.

Respecto a la protección de los Monegros, Pablo Munilla indicó que el tema no está cerrado, aunque lo ve difícil porque "hay que buscar 20.000 hectáreas que cumplan la nueva ley", lo que obligaría a prohibir la caza.

El Patronato también repasó el presupuesto y las ayudas a ayuntamientos y particulares. Después de dos años sin subvenciones estatales, Basilio Rada trajo la buena noticia de que el Ministerio de Medio Ambiente ha vuelto a consignar dinero para las áreas de influencia socioeconómica, 274.000 euros para la de Ordesa.