Oliván simplifica el mapa sanitario para unificar servicios y reducir jefaturas

La DGA deja solo tres áreas (una por provincia) tras admitir "problemas de coordinación y planificación".

El director gerente del Salud, Ángel Sanz, y el consejero Ricardo Oliván, en las Cortes.
Oliván simplifica el mapa sanitario para unificar servicios y reducir jefaturas
Asier Alcorta

Tras años de cambios y revisiones en el mapa sanitario de Aragón, el departamento de Sanidad ha hecho realidad uno de sus objetivos más perseguidos, y también uno de los más criticados por sindicatos y partidos políticos. El Salud reduce a tres sus áreas y sectores sanitarios, y lo hace, como ayer se publicó en el Boletín Oficial de Aragón, para lograr "una mejor ordenación de los servicios".


Sus bazas son la eliminación de cargos directivos (en 2011 ya cesó a la mitad de sus gerentes), la posibilidad de centralizar compras y servicios y, a nivel asistencial, la unificación de servicios, algo que la DGA ve fundamental en hospitales como el Miguel Servet y el Clínico, separados por menos de un kilómetro. La idea sería lograr que algunos servicios que están duplicados en ambos centros, como Neurocirugía u Oncología Radioterápica funcionaran bajo una sola jefatura. Pediatría, en concreto, tiene el proyecto muy avanzado.


Cada área tendrá su correspondiente sector, y a partir de ahora (hay seis meses para aplicarlo) serán uniprovinciales. Es decir, área I (sector Huesca); área II (sector Zaragoza) y área III (sector Teruel), dentro de la enésima reorganización del mapa. Al principio, hubo cinco áreas y ocho sectores. Después, se aumentó el número de áreas a ocho y, en 2011, estas se mantuvieron, pero los sectores se redujeron a cuatro. Ahora, la DGA reconoce que "la mayor descentralización no ha dado los resultados previstos" y que la reducción de los sectores a cuatro "ha resultado insuficiente". Además, "la actual estructura territorial ha generado problemas de planificación y coordinación, con una mayor indefinición de la dirección y la gestión".


Los cambios no serán pocos y, de entrada, sobra un gerente en Zaragoza. Ahora mismo, hay dos: uno para el Royo Villanova, el Provincial y el Miguel Servet, y otro para el Clínico. Además, el decreto modifica las competencias del gerente y del director de gestión. "Pero lo que más nos interesa es empezar a trabajar desde unidades, y no con departamentos estancos en cada hospital", explican desde la DGA. El fin es crear unidades de gestión clínica, donde puedan integrarse diferente especialidades muy relacionadas, como podría ser, un área musculoesquelética, con la unión de Traumatología, Fisioterapia y Rehabilitación. Crear un mapa sanitario de este tipo es otro de los requisitos que se imponen al Instituto de Investigación Sanitaria (IIS) de Aragón para lograr una acreditación del Carlos III que le permitirá ser centro de excelencia y optar a más fondos que se reparten a nivel estatal.


Críticas al decreto


Este proyecto recibió un aluvión de alegaciones por parte de sindicatos y partidos políticos, que interpretan que solo se busca amortizar personal. Cemsatse fue muy crítico con la posibilidad de que los especialistas tuvieran que soportar peores condiciones de movilidad, aunque se llegó a un acuerdo con el Salud el año pasado para que se primase la elección de voluntarios y, si esto no fuese así, el tema se tratase en Mesa Sectorial.


CSI-F lamentó que ninguna de sus alegaciones fuese considerada, e insistió en que esta redistribución generará "más caos y una peor gestión, sobre todo de cara al paciente". CC OO cree que "todo está encaminado a reducir la contratación al máximo, la centralización de servicios y a un sistema de movilidad forzosa no pactada".