—¡Venga! De dos en dos, cogidicos de la mano.

Palafox, deja en paz a Agustina.

—Pero si ha empezado ella, que es una mandona.

—Servet y Zurita, he dicho que os deis la mano.

—Seño, es que Jerónimo me da mal rollo, que tiene la mano ardiendo.

—Goya y Bayeu, como vuelva a veros pintar en la pared…

—¡Jolines que sí, Ramón!, que Méjico lleva tilde.

—¿Y tú qué sabes, listilla?

—Moliner y Sender, dejad de discutir que nos vamos.

Alfonso, si vuelves a pegar a Mustain, te quedas castigado. Y tú, Mustain, no seas egoísta y déjale sitio que cabéis los dos.

—Pignatelli y Aranda, ¿queréis dejar de tirar piedrecitas al canal?

¡Por Dios, Fleta!, deja de cantarulear y ponte en la fila con Gargallo.

—Con Pablo no, que tiene las manos llenas de plastilina.

—Señorita, ¿y yo con quién me pongo?

—A ver… ¿Queda alguien para ponerse con Martínez de Luna?

Bueno, Pedro; pues tendrás que ir tú solico.

¡Hala, vamos!

¡Madre, qué chicos! Y como alguno se pierda… a ver qué historia contamos luego.

Lea todos los relatos que participan en el concurso.