Bendito país

Todos eran prohombres que se dirigían a Zaragoza en el mismo carruaje. Francisco venía de Ariza, Pancho de Ateca y Paco se había subido en Calatayud. La conversación fue animada desde el principio hasta que a media mañana llegaron al primer control francés. Los tres llevaban sus células de identidad, pero la tensión sólo se descargó al rato, con un par de chistes sobre la soldadesca gala. Ello dio pie a varios insultos en voz baja hacia Napoleón y Pepe Botella. Sin duda eran hombres patrióticos y se supieron reconocer al momento, lo que trajo un buen trago de aguardiente. Pasada una hora, de la carreta salían unas jotas desentonas pero bravías y en plena emoción se oyó a Paco gritar “Viva el rey Carlos IV”, a lo que Francisco contestó con toda seriedad “Viva Fernando VII” y Pancho gritó con estupor ”Viva la Pepa y la república” y como por arte de birlibirloque los puños volaron por todo el coche. Mientras, desde el pescante, se oía al cochero exclamar “¡Bendito país!”.


Lea todos los relatos que participan en el concurso.