Sorpresas
Me aflojo la corbata nervioso antes de enseñarte la caja de madera. Espero sorprenderte. Tu la miras con curiosidad. Hoy estás preciosa, por cierto. Te pido que la abras. Deslizas la tapa. Frunces el ceño y metes la mano entre las virutas de papel que protegen su contenido. Sonríes mientras sacas lentamente lo que tanto me ha costado encontrar. Campo de Borja 2009. El mismo vino de nuestra boda, tal día como hoy, hace seis años. Hemos pasado buenos momentos y otros no tan buenos, pero yo no cambiaría ni uno. Tus ojos se humedecen de la emoción. Te acaricio la mejilla. Nos inclinamos y nos besamos. Me dispongo a abrirla para brindar por nosotros, pero posas tu mano sobre la mía. Paro y te miro extrañado. "Hoy no puedo beber" me dices sonriendo. Cierras tus dedos alrededor de los míos y conduces mi mano hasta tu vientre. Nos miramos y no hace falta decirnos más. Sendas sonrisas se dibujan en nuestras caras. No importa, la guardaré para enseñársela algún día a nuestro tan deseado hijo.
