Confusión

De cuando en cuando me gusta coger el 39 en la Plaza San Miguel y llegar al final de línea en Torrero. Como tantos y tantos años, entonces de incógnito y ahora de jubilado.

Hace casi 40 años que llegué de mi Granada natal y hace poco más de 20 que me jubiló la Benemérita. En esa fracción de casi 20 años, en un tiempo que en ocasiones parece un segundo, presté mi servicio en el penal ahora cerrado, reducido, modificado,…

Cuando lo veo no se qué pensar.

Hay días que estoy convencido que deberían haberlo derruido por completo, como me gustaría derruir mi memoria. Poco bueno había allí.

Otros días tengo la certeza que no todo fue tan malo. Que hubo buenos compañeros, buenos momentos. Que hubo reclusos que se encauzaron y otros que fueron bien encerrados.

Divago en mi memoria y busco una respuesta.

Hoy bajaré andando hasta casa, siempre me resultó más fácil regresar que ir al penal. Al contrario que para el preso.


Leer más relatos del concurso de relatos cortos de Heraldo 2015