El mercado inmobiliario cerró el año pasado en la capital con un dato positivo: se registraron más operaciones que en el periodo precedente. Según los datos publicados por el Ministerio de Fomento, la elevación fue considerable, pues el movimiento de viviendas se incrementó en algo más de un 30% (concretamente en un 30,5%). Las referencias, con las del último trimestre de 2014 aún provisionales, establecen que 342 viviendas cambiaron de manos en el anterior ejercicio, mientras que la cantidad de 2013 ascendió a 262. Es decir, se compraron 80 viviendas más. Fomento detalla además en su estudio los resultados en cuanto a vivienda nueva y de segunda mano.

En este desglose, el comprador se inclina más por las unidades antiguas que por las de reciente construcción. Si las primeras suponen un 53,5%, las segundas representan un 46,5%. Si bien esta proporción es desfavorable a las nuevas promociones, hay que tener en cuenta que la evolución interanual parece también positiva. Y es que en 2013 las viviendas recientes únicamente pesaron un 35,5% en la estadística. El porcentaje de 2014 aún queda lejos del nivel que alcanzaba al comienzo de la crisis. Considerando 2008 como la primera anualidad completa en que se hicieron patentes las complicaciones económicas (especialmente sensibles en un primer momento para el sector de la construcción, cuyas dificultades todavía siguen patentes), la caída ha sido de 18 puntos porcentuales. En 2008 el 64,5% de las transacciones tuvo por objeto a la vivienda nueva.

Por trimestres, para el año pasado resultó fructífero sobre todo el cuarto, cuando se registraron 101 unidades. La cifra vino a ser como una culminación de la tendencia de los periodos comprendidos entre abril y junio y julio y septiembre, que contabilizaron 91 y 92 operaciones, respectivamente. El año había comenzado con 58 viviendas vendidas, idéntica cantidad a la del último trimestre de 2013. En este año fueron considerables los registros alcanzados en el segundo trimestre y el tercero, con 85 y 81 viviendas, respectivamente. De enero a marzo la estadística del Ministerio de Fomento únicamente registró 38 transacciones.

La diferencia entre 2008 y 2014 se encuentra en 72 viviendas, un 17% menos. Al comienzo de la crisis se contabilizaron 414 operaciones. Es decir, que prácticamente lo que ganó el año pasado en relación a su precedente es lo que ha perdido la capital desde que se hicieron patentes las dificultades del sector inmobiliario.

Por clasificación de viviendas y en unidades, en 2014 se vendieron 159 nuevas y 183 de segunda mano. En 2013 la relación quedó en 93 frente a 169. En 2008 la vivienda de reciente construcción alcanzó 267 compraventas, por 147 de la de más antigüedad.

El Ministerio de Fomento publicó hace unas semanas el estudio acerca de la valoración de los inmuebles. En este sentido, el precio del metro cuadrado descendió el año pasado en un 10%, al llegar a los 1.189 euros frente a la marca de los 1.329 de 2013. La depreciación de las viviendas desde 2008 alcanza un 36%.