Preocupación en el Jalón por las afecciones en los frutales

Más de 1.000 hectáreas han resultado afectadas en un momento crítico para la producción. Las dos familias evacuadas en Bárboles vuelven a sus casas.

Más de 1.000 hectáreas dedicadas a la producción de variedades frutícolas como la pera, la manzana, el melocotón o la nectarina han resultado afectadas esta semana por la crecida del río Jalón y sus afluentes. En la zona no recordaban una riada similar desde 1956, explica Jesús Ignacio Sánchez, miembro de la junta del Atria de Fruticultores de Épila, que agrupa a 155 productores de más de una decena de municipios ribereños desde Calatorao hasta Alagón.


En algunas zonas se acumuló hasta un metro de agua. Confían en que el nivel baje pronto y los árboles no resulten afectados, aunque "las plantaciones jóvenes se podrían asfixiar" si la situación persiste, alerta Sánchez. No obstante, la principal preocupación ahora es salvar la producción, que por ejemplo en el caso de la pera blanquilla se encuentra "en el momento crítico de la floración", por lo que requiere tratamientos para prevenir plagas y enfermedades, que además podrían verse favorecidas por la humedad.


"Entramos a los campos como podemos y estamos corriendo riesgos", reconoce este agricultor de Rueda de Jalón, donde más de 200 hectáreas quedaron anegadas y el agua llegó incluso a tres casas.


A falta de una inspección exhaustiva de la zona, UAGA calcula que hay más de 1.000 hectáreas afectadas, además de daños en caminos o márgenes, por lo que tanto su secretario general, José Manuel Penella, como el Atria de Épila reclaman medidas urgentes para reparar los desperfectos y las pérdidas en la producción. Según Penella, el consejero de Medio Ambiente de la DGA, Modesto Lobón, se ha comprometido a incluir en las ayudas aprobadas a raíz de la riada del Ebro a los afectados por las crecidas del Jalón, el Guadalope y el Matarraña. Precisamente Lobón visitó ayer las localidades turolenses de Calaceite, Mazaleón, Valdeltormo y Lledó, que recibirán 450.000 litros de agua diarios tras quedar dañados sus abastecimientos. Además, visitó Alcañiz.


Por otra parte, las dos familias desalojadas el miércoles por la crecida del Jalón en Bárboles pudieron regresar ayer a sus casas, en una zona rústica próxima al cauce.