La labor de inspección de la Guardia Civil ha detectado un total de 42 talleres ilegales en Aragón. Así lo ha manifestado Conepa, la Federación Española de Empresarios Profesionales de Automoción, tras solicitar la información a los cuerpos de seguridad, que han llevado a cabo una campaña de control por todo el país que ha destapado la presencia de 1.180 establecimientos irregulares en todo el país.

En concreto, se han localizado 995 talleres con una “actividad claramente ilegal” y otros 185 en los que, sin estar identificados como tales y “situados en las más variadas localizaciones”, también ofrecían los servicios de reparación. “Llevamos años denunciando esta situación, pero no se conseguía nada, por lo que solicitamos una actuación coordinada que ya empieza a dar resultados”, explican fuentes de Conepa.

Fruto de esta insistencia, y desde el pasado mes de septiembre, la Guardia Civil, a través del Seprona, ha coordinado esta labor. “Pedían certificados de medio ambiente, libros de contabilidad para ver si declaraban el IVA, documentos de identidad para verificar que las personas que allí trabajaban estaban legalmente contratados, etc.”, explican. Y todo ello dentro de una operación que todavía está en marcha. “En Madrid las inspecciones han comenzado ahora”, aseguran.

En la comunidad aragonesa se ha abierto expediente por 32 establecimientos de reparación (15 en la provincia de Zaragoza, 3 en la Huesca y 14 en la de Teruel) que actuaban de alguna manera irregularmente. Además, se han localizado una decena de puntos de actividad que, sin estar anunciados como tales, ejercían como talleres ocultos. “Hay gente trabajando en garajes privados, chalés, fincas...”, critican.

En la capital aragonesa, por ejemplo, muchos de ellos se ubican en zonas poco pobladas, en especial en el área metropolitana y en los barrios rurales, donde pueden llevar a cabo esta actividad con mayor discreción. Y aunque la mayoría no están acondicionados para grandes reparaciones, ofrecen cambios de rueda, de aceite, y pequeñas averías y golpes de chapa a precios muy por debajo del mercado legal.

De hecho, se calcula que cerca de un 10% de las reparaciones de vehículos que se realizan en España se hacen en talleres ilegales, lo que genera unas pérdidas de 3.500 millones de euros al año para el sector de la automoción.

Según el informe que se ha hecho llegar a Conepa, Andalucía (con 302 ilegales detectados), Castilla-León y Galicia (132 en ambos casos) y la Comunidad Valenciana (122) son las autonomías que lideran este mercado negro. Además, en el mismo solo se incluyen las actuaciones llevadas a cabo por la Guardia Civil, pese a que otros departamentos de la Administración -como los ministerios de Hacienda, Empleo e Industria o las policías municipales- también están haciendo labores de inspección.

Hasta 200 solo en Zaragoza

La Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor (Ganvam) también mostró su preocupación ante un mercado negro descontrolado. El director general de esta organización, Tomás Herrera, señaló en Zaragoza que al margen del daño económico que estos talleres ilegales provocan tanto en el sector como en las arcas públicas, tienen también un impacto negativo en la seguridad vial.

A su juicio, el consumidor que acude a estos talleres no tiene la garantía suficiente de que su vehículo esté en plenas condiciones para circular, además de no disponer tampoco de presupuestos ni facturas oficiales. En la Asociación Provincial de Talleres de Zaragoza van más allá y aseguran que tan solo en la provincia podría haber hasta 200 establecimientos de estas características.