El arte reivindica su espacio

La muestra de Fernando II en la Aljafería y la reapertura del Museo Goya Colección Ibercaja, hitos del nuevo mapa cultural zaragozano dibujado en los últimos años.

Un grupo de visitantes, en el renovado Museo Goya Colección Ibercaja, tras un panel que ofrece información y exhibe dos cuadros
Un grupo de visitantes, en el renovado Museo Goya Colección Ibercaja, tras un panel que ofrece información y exhibe dos cuadros
Óiver Duch

El mapa artístico de Zaragoza ha experimentado, en menos de cinco años, un cambio radical. Nuevos edificios destinados a las artes plásticas, con exposiciones de primerísimo nivel, se unen a espacios renovados y propuestas diferentes que atraen la atención de un público ávido por ampliar horizontes. Desde equipamientos ligados al arte más actual al resurgir de monumentos históricos, la oferta se ha ido ampliando para situar a la ciudad en un destino (cultural) a tener en cuenta.


La presencia esta semana de los Reyes para inaugurar la exposición de ‘Fernando II’ en el Palacio la Aljafería y visitar el renovado Museo Goya Colección Ibercaja contribuyó a dar una proyección nacional a unos montajes que acercan piezas singulares y únicas.


El edificio dedicado al pintor de Fuendetodos ha reabierto sus puertas con una apuesta más fuerte, si cabe, por Goya, y aspira a convertirse en uno de los centros de referencia del artista aragonés. Como plato fuerte, el museo ofrece también una exposición sobre sus inicios artísticos, con 28 cuadros, algunos de ellos inéditos.


"Se están haciendo bien las cosas –valora Jesús Pedro Lorente, profesor de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza y secretario de la Asociación Aragonesa de Críticos de Arte–. Hace dos décadas era difícil encontrar una referencia cultural en las guías turísticas". Hoy, sin embargo, conviven propuestas originales e innovadoras con espacios dedicados al arte más clásico. Este ‘boom’ que se aprecia en la ciudad "coincide con periodo preelectoral", pero "bienvenida sea la premura de los calendarios políticos si así mejora la oferta y da trabajo a la gente del sector cultural".


El visitante que quiera dedicar su tiempo a recorrer distintos espacios expositivos en la capital aragonesa puede elegir entre una amplia y variada programación:desde los fondos del Museo de Zaragoza (en la plaza de los Sitios), al Museo Pablo Gargallo, que además de piezas del escultor zaragozano exhibe retratos de los siglos XIX y XX del coleccionista Eduardo Laborda, o a la escultura española del XX de la colección del Instituto de Crédito Oficial de Crédito, en el Palacio de Sástago.


Muy cerca de ambos espacios se concentran, en la plaza del Pilar, varios museos: Diocesano, Pilarista (que reabrió en febrero tras casi dos años de remodelación) y el de Tapices. Este, ubicado en la catedral de San Salvador (la Seo) y considerado único en el mundo, conserva una colección de piezas de los siglos XIV al XVII. Así como los cuatro incluidos en la Ruta Cesaraugusta (Foro, Puerto Fluvial, Termas y Teatro) que en 2014, coincidiendo con la conmemoración del bimilenario del emperador romano, recibieron a 117.849 personas.


En este competitivo panorama, el Gobierno de Aragón ofrece, en el Instituto Aragonés de Arte y Cultura Contemporáneos (IAACC) Pablo Serrano, la segunda muestra con fondos de la colección de Pilar Citoler, que adquirió hace poco más de un año por 1,5 millones de euros. A escasos metros está Caixaforum, una de las referencias del mundo del arte en la ciudad, que sigue ofreciendo una potente programación, fiel al objetivo con el que se puso en marcha. Con la muestra de Joaquín Soro-lla, inaugurada el pasado viernes, ya son cinco las exposiciones de primer nivel que ha promovido. Se abrió el 27 de junio del año pasado, con una inversión de casi 20 millones, y, durante 2014, tuvo 258.882 visitantes. Más de 105.00 se decantaron por el mundo de animación de Pixar. El espacio reservado a la cultura contemporánea lo ocupa Etopia, el Centro de Arte y Tecnología, que, desde noviembre de 2013, se perfila como un escaparate de las expresiones artísticas más vanguardistas.


Entre las opciones más originales, se encuentra el Museo del Fuego, el del Cine Mudo –que se presentó esta semana– o el de Origami, situado en el Centro de Historias. Dedicado al arte de la papiroflexia, es uno de los proyectos culturales más singulares de Aragón, único en su género en Europa. A todos los museos zaragozanos, además, hay que añadir la actividad de las salas expositivas y de las galerías privadas, que ofrecen programación de calidad.A corto plazo


El futuro seguirá deparando sorpresas en el terreno cultural. El futuro Museo de Ciencias Naturales de la Universidad de Zaragoza, ubicado en los bajos del Paraninfo y con una superficie de casi 1.000 metros cuadrados, se podría inaugurar en breve. Integrará los fondos de la Colección Paleontológica de la Universidad de Zaragoza, con más de 100.000 fósiles de plantas y animales, vertebrados e invertebrados, de los cinco continentes; y la colección de Longinos Navás.


Entre las citas expositivas que llegarán en las próximas semanas está la dedicada a la obra pictórica de la religiosa Isabel Guerra, en el Patio de la Infanta, o a la del artista Fernando Navarro, en la Lonja.


Para Manuel García Guatas, catedrático emérito y asesor de proyectos de investigación del Master de Museos Campus de Huesca, "la cultura tiene, y tendrá, fuerza, a pesar del 21% del IVA, por varios factores: atrae en lo personal, es un factor de conexión cultural y, sobre todo, es una forma de poder ver de una manera renovada exposiciones artísticas".