“Es mejor irte cuando debes a que te saquen a patadas o en un ataúd”

González Macho deja de presidir la Academia de Cine para dedicarse más
a su trabajo, aunque admite su "desgaste".

"Es mejor irte cuando debes, antes de que te saquen a patadas o en un ataúd". Lo dice un risueño e irónico Enrique González Macho (Santander, 1947), que 24 horas después de presentar su inesperada dimisión como presidente de la Academia de Cine, dio sus razones para un adiós tranquilo, sin reproches ni dobleces. "No estoy enfermo y el único motivo es que mi actividad profesional me exige más atención, dado que no soy rico", dijo. Insistía por activa y por pasiva en que nadie debe buscarle tres pies al gato, que cree llegado el momento de decir adiós "cuando las cosas están bien" y dar paso a la savia más joven. Comprende, con todo, la sorpresa que ha generado su inopinada salida "en un país en el que nunca dimite ni dios".


Aludió a los "momentos difíciles" por los que pasa su actividad profesional, la producción y distribución cinematográfica, "que exige mayor dedicación", y repitió que dimite sin amargura y convencido de que "la misión está cumplida". "Me entristece irme de esta casa, en la que he pasado unos años muy gratificantes, pero ahora mismo me siento ligero de peso", afirmó con la voz quebrada por la emoción en algún instante.


Reconocía, no obstante "cierto desgaste", admitía que el cargo "erosiona" y que "a veces caen bofetadas por todas partes". "Las cosas tienen un tiempo y un recorrido y creo que hay que renovarse" dijo. "Nadie es insustituible y siempre hay gente más válida que uno mismo" planteó González Macho en la rueda de prensa en la que compareció flanqueado por Antonio Resines y Judith Colell, vicepresidentes a quienes agradeció su colaboración.No somos borregos


"Ahora la Academia está bien y es el momento en el que hay que dejarlo, no cuando las cosas están mal" reiteraba el ya expresidente, haciendo un balance "muy positivo" de sus cuatro años al frente de la institución. "La Academia está mas viva y más fuerte que nunca y tiene un enorme futuro". "Somos un ejemplo para países de nuestro entorno como Francia, que estudia y adopta nuestros métodos" se felicitó.


"No dependemos del poder público, las subvenciones alcanzan apenas al 9% del presupuesto, que da para los gastos corrientes; vivimos del dinero privado y eso nos da independencia para ser libres y funcionar por nuestros criterios y no depender del poder político, sea del color que sea" se ufanó. "Somos un colectivo diverso y con ideologías de todo tipo, y eso es fantástico. Lo malo sería que fuéramos una academia de borregos, todos con las mismas ideas".


"Hemos pasado una época muy difícil y el poder político no ha sido favorable, más bien todo la contrario, pero eso nos permite pensar que las cosas no serán peores con los próximos" dijo optimista. No hubo más reproches al Gobierno aunque admitió que "las piedras, que no rocas" que ha hallado en su camino las pusieron "las autoridades".Exige "ganas y entusiasmo"


Reelegido para un segundo mandato en mayo pasado, asegura González Macho que su dimisión es fruto de la reflexión. "No he tomado esta decisión a las bravas; he hecho lo que debía y me siento ligero de peso", insistía. "Nadie me ha obligado a irme no me arrepiento de nada y guardare un fantástico recuerdo de mis años en esta casa" concluyó entre aplausos.


Llegó a la presidencia de la Academia en abril de 2011, tras ganarle la partida a Bigas Luna. Su intención era no presentarse a un segundo mandato pero cambió de opinión al detectar "un germen de dos o tres candidaturas muy peligrosas". Exige a su sucesor, Antonio Resines, "ganas y entusiasmo". "Esto es vocacional, no se gana un duro y se trabaja para servir a los demás, de modo que si lo que mueve a un aspirante son la ganas de medrar será un desastre" vaticinó.