Un centenar de actos paralelos arroparán las escenas principales de las Bodas de Isabel

Espectáculos pirotécnicos y de acrobacias, danzas andalusíes, escenificaciones de templarios de Monzón y Portugal o visitas guiadas a través de las jaimas repartidas por la ciudad y su gastronomía. Estas son algunas de las novedades que se han incluido este año en el programa de las Bodas de Isabel, un repertorio de actividades cuyo presupuesto, de 300.000 euros, no ha experimentado en esta edición recorte alguno.

Alrededor de un centenar de actos arroparán la recreación teatral basada en los Amantes, que tendrá lugar del 19 al 22 de febrero en un total de 11 espacios habilitados en diferentes zonas urbanas. La plaza de los Amantes, recientemente restaurada, se estrena en esta ocasión como emplazamiento teatral con el ‘Rincón de la bruja’, una actividad relacionada con el esoterismo, pero se mantendrán localizaciones tan tradicionales como la jaima cultural de la ronda de Ambeles, donde se desarrollarán los conciertos de música folclórica de ‘Samarúas’ y los turolenses ‘Esfuriatronadas’ y ‘Lurte’. Asimismo, los parque de los Botánicos y los Fueros serán, como viene siendo habitual, las sedes de los campamentos almogávar y militar, respectivamente, y en torno a los cuales se concentrarán más de 400 recreacionistas, procedentes mayoritariamente de fuera de Teruel. La plaza de toros, escenario del torneo del rey, y la carpa nocturna de los Planos, completarán el listado de espacios destacados.

La directora de la Fundación Bodas de Isabel, Raquel Esteban, señaló que como actos estrella del programa figuran las escenificaciones de la leyenda de los Amantes, que se podrán seguir en las dos pantallas instaladas en el Casco Histórico en los momentos de máxima concentración de público. Se contemplan, igualmente, actividades, generalmente exhibiciones de oficios y talleres, realizadas por una buena parte de los 150 grupos que recrean con su indumentaria y equipamiento en las calles el tejido social, religioso, político y militar del Teruel del siglo XIII.

Raquel Esteban indicó que la Fundación ha abierto este año un vínculo de colaboración con Renfe por el cual se van a distribuir programas y carteles de la fiesta medieval en todas las estaciones centrales y de cercanías de Valencia y Zaragoza, "con lo que supone una red de influencia de 70.000 personas", explicó la gerente. Para llevar a cabo la labor de difusión a través del soporte de papel, se han editado 30.000 ejemplares del programa de mano, así como 800 carteles, en los que están representadas las manos entrelazadas de Isabel y Diego bajo una lluvia de pétalos.

El alcalde de Teruel, Manuel Blasco, quiso destacar la repercusión económica que esta fiesta supone, sobre todo, para el sector servicio, cuyos empresarios "de media provincia hacen el agosto en febrero", dijo. Pero hizo hincapié en el hecho de que este acontecimiento, el de mayor trascendencia para la ciudad junto con la Vaquilla, "cuente con más financiación privada que pública". Según explicó, el 60% de los 300.000 euros de presupuesto de la recreación medieval procede de aportaciones privadas, de firmas como Caja Rural, Hiper Simply o cervezas Ámbar, que, junto con la CEOE, han apoyado desde prácticamente sus inicios a las Bodas de Isabel. A los fondos disponibles este año hay que sumar 150.000 euros que el FITE asignó al funcionamiento de la Fundación Bodas de Isabel.

A su juicio, la décimo novena edición de la recreación medieval va a ser "la más internacional", debido a que a través de las redes sociales se va a poder seguir la fiesta en cualquier parte del mundo a tiempo real.