La crecida ya ha afectado a 8.000 hectáreas de cultivo

Antonio Suárez reconoce que la limpieza de los ríos es "la gran asignatura pendiente" para minimizar los efectos de las crecidas del Ebro.

Pradilla de Ebro (Archivo)
La crecida ya ha afectado a 8.000 hectáreas de cultivo
DGA

El Gobierno de Aragón estima que, hasta el momento y según las valoraciones de los técnicos del Departamento de Agricultura, la crecida del Ebro ha podido afectar a unas 12.000 hectáreas de terreno, de las que 8.000 son superficie cultivada, si bien habrá que esperar unos días para conocer la afección con detalle.


El consejero de Política Territorial e Interior, Antonio Suárez, ha asegurado que la limpieza de los ríos es "la gran asignatura pendiente" para minimizar los efectos de las crecidas, durante la visita que hoy ha girado a los municipios de Pradilla de Ebro, Novillas, Boquiñeni y Alcalá de Ebro.


El consejero ha insistido en que esta crecida es "ordinaria", con un caudal inferior al del 2013, pero ha reconocido que ha provocado daños "similares" en los campos y "superiores" en algunas viviendas próximas al Ebro.


Las administraciones están trabajando en el refuerzo de las motas pero es necesario que lo hagan también, ha dicho, en la limpieza de los cauces "para eliminar las gravas que incrementan la altura del lecho del río", según han indicado fuentes del ejecutivo aragonés.


A ese respecto, Suárez ha añadido que existe un grado "demasiado elevado de proteccionismo ambiental" que impide tomar este tipo de decisiones.


El titular de Política Territorial ha señalado también que el ejecutivo estudia solicitar al Gobierno central las modificaciones legales necesarias para que la calificación de crecida ordinaria o extraordinaria "no tenga en cuenta sólo los caudales medios de los últimos diez años, sino la altura media del río en este tipo de episodios".


El objetivo es no generar más daños a los agricultores de las zonas afectadas por las avenidas.Críticas por la falta de acción

Antonio Manero, de la Plataforma de Afectados por las Inundaciones,  ha criticado, en declaraciones, que en los 30 ó 40 años últimos años la Confederación no haya actuado en el Ebro y que "ahora que quiere hacerlo, no le dé tiempo" porque la actuación del agua es más rápida.


Se están creando "islas grandísimas en algunas zonas" y el fondo del río ha aumentado en algunas partes "más de un metro", ha añadido.


En el año 1960-61 hubo una crecida que llegó a alcanzar los 4.000 metros cúbicos por segundo, "más de la mitad que ahora", y sin embargo "no causó daños" porque el cauce estaba limpio, según Manero, que ha criticado que los daños son mayores cada vez.

En Gallur afectadas 1.800 hectáreas

Solo en la población de Gallur, ha estimado que las hectáreas de cultivo afectadas son 1.800 porque se trata de una zona "que no tiene defensas".


Aguas abajo de la capital aragonesa, en Pina de Ebro, la situación estaba "controlada" para la llegada de la punta de la crecida, prevista para esta tarde-noche con unos 1.800 metros cúbicos por segundo, después de que la CHE haya reforzado recientemente una mota defensiva de la margen derecha que estaba "débil".


Su alcaldesa, María Teresa Martínez, no cree que el agua llegue a zonas de cultivo ni tampoco a la población, aunque sí ha reconocido, en declaraciones a Efe, que el pueblo "tiene cierto riesgo porque está muy cerca del río y cada vez, con los mismos metros cúbicos, se ve más cerca el agua".


Ello se debe a que el Ebro "no está limpio y va modificando su trayecto".


Pese a las afecciones y la inquietud que el aumento del caudal del Ebro provoca en estas poblaciones ribereñas, la crecida sigue siendo también un atractivo para los ciudadanos que, en el caso de Zaragoza, se acercan a los puentes y paseos cercanos al cauce para comprobar por sí mismos cómo el agua embarrada arrastra a gran velocidad algunas ramas de árboles.


A las 18.00, el río pasaba por la capital aragonesa con un caudal de 1.709 metros cúbicos por segundo -por debajo de los 1.800 inicialmente previstos- y una altura de 4,67 metros, con tendencia a estabilizarse, pese a que se mantiene en nivel de alerta roja.


La estación navarra de Castejón registraba a esta misma hora 1.169 metros cúbicos por segundo y una altura de 5,57 y el nivel de aviso ha bajado a amarillo, de prealerta.


Desde la Confederación Hidrográfica del Ebro han indicado que más que una punta de caudal, que es "difícil" de determinar cuándo se ha alcanzado, la situación responde a una "crecida de meseta", lo que significa que los niveles "muy altos" obtenidos se mantendrán "durante más de 24 horas" y, en el caso de la capital aragonesa, "hasta el jueves no se va a iniciar el descenso".


Los bomberos de Zaragoza, que a primera hora de esta tarde han desalojado a veinte vecinos del Monzalbarba, que han solicitado serlo para tener más seguridad y pese a que no corrían riesgo tras la rotura de una mota, han explicado a Efe que pasarán la noche realojados en casas de familiares y que la situación ya estaba "estabilizada".