Los bares esperan que se dé luz verde a la instalación de máquinas de apuestas

La DGA prevé convocar a la comisión aragonesa del juego durante el mes de febrero. De salir adelante, habrá 1.000 máquinas de apuestas en los bares de la Comunidad.

Las máquinas serán similares a las que se encuentran en las casas de apuestas
Los bares esperan que se dé luz verde a la instalación de máquinas de apuestas
MAITE SANTONJA

Después de tres años de debate y uno más de espera cuando ya se daba por hecho, los representantes de los bares aragoneses esperan que 2015 sea, “al fin”, el año en el que se puedan empezar a encontrar máquinas de apuestas deportivas en los locales de la Comunidad. Una posibilidad defendida por los hosteleros para mejorar su oferta pero que es duramente criticada por las asociaciones contra la ludopatía, que entienden que un bar “nunca va a poder ofrecer las mismas medidas de control” que una sala de juego o un casino.


Los hosteleros ven en esta medida “un pequeño aporte” que permitiría dotar de más atractivo a sus locales, “sobre todo, a los más pequeños”, según explica el presidente de la Asociación Cafés y Bares de Zaragoza y Provincia, Pedro Giménez, quien lamenta que se haya entrado en 2015 sin ningún avance en este aspecto.


Y es que el debate sobre la instalación de máquinas de apuestas deportivas en los bares, algo ya aprobado en autonomías como la vasca, la gallega o la navarra, lleva coleando desde el 2011, cuando Aragón se dotó de una regulación propia en el ámbito de las apuestas deportivas. Tras meses de conversaciones entre los sectores y los colectivos implicados, la implantación de estas máquinas -que serán similares a la que se pueden encontrar en los 'corners' de apuestas- fue impulsada para que entrara en vigor a comienzos del año pasado. Sin embargo, en diciembre de 2013 una enmienda de última hora promovida también por los grupos del Gobierno (PP y PAR) en las Cortes retrasó su puesta en marcha, dándose un año de plazo para conseguir un mayor consenso.


“Durante el verano mantuvimos una reunión con la Dirección General de Interior en la que se nos aseguró que en la primera quincena de enero el tema estaría ya prácticamente resuelto”, señala Giménez, quien reitera que la instalación de estas máquinas “tal y como estarían reguladas, no tendrían que suponer ningún perjuicio”.Habrá 1.000 máquinas en los bares aragoneses


Según explican desde el Departamento de Política Territorial e Interior, el Gobierno tiene intención de convocar a lo largo del mes de febrero a la comisión aragonesa del juego, órgano formado por asociaciones de empresarios de salones de juegos, bingos, hosteleros y organizaciones de ayuda contra la ludopatía, para que se acabe de acordar el marco sobre el que se impulsará definitivamente la regulación de estos dispositivos.


En principio, según el borrador del Decreto, podrán instalarse 1.000 máquinas de este tipo en los bares de toda la Comunidad (menos de las 1.500 que se estimaron en un principio), quedando excluidos los establecimientos que se encuentren en estaciones, aeropuertos, mercados o centros comerciales si estos no están cerrados y aislados del paso del público general. Además, tampoco podrán instalarse en establecimientos que ocupen parte de una vía pública o en zonas de terraza.


Por otra parte, las apuestas realizadas en los bares estarán limitadas a un máximo de 20 euros por envite, pudiéndose cobrar en efectivo los premios que no superen los 200 euros.


Desde Azajer, la Asociación Aragonesa de Jugadores de Azar en Rehabilitación, que también participa en la comisión de juego, la llegada de las máquinas de apuestas a los bares supondrá “una apertura del juego a espacios que no están tan controlados como los casinos o las salas de juego”. “Se fomenta el hábito en espacios donde no puede haber menores”, explica José Vicente Marín, director terapéutico de la asociación, que además critica que haya “cierto afán recaudatorio por parte de la administración”, algo que el Gobierno niega aludiendo a que durante 2013 solo recibió 430.000 euros procedentes de las apuestas deportivas y que el uso de estas máquinas estará ligado al registro de la Dirección General de Ordenación del Juego, el cual solicita el número de identidad para poder apostar y evitar tanto la participación de menores como la de personas que tengan problemas denunciados de ludopatía.