Una aventura de mitos y leyendas

La búsqueda de los nubeiros –seres de la mitología gallega, encargados de la lluvia–, es el hilo conductor del libro ‘La leyenda de la ciudad sumergida’ de Antón Castro, que tiene al niño Esteban como protagonista. El pequeño ve como el agua amenaza con cubrir por completo su pueblo, situado en Galicia, y comienza así una aventura para evitarlo en busca del responsable de los fenómenos meteorológicos, lo que le llevará a conocer a muchas criaturas que cabalgan entre el mito, la tradición y la fantasía. Un relato de 114 páginas enfocado a niños a partir de los 10 años y cuya esencia recuerda al Principito o a La Historia Interminable, y que Castro describe como "un libro que nos narra un viaje, en el que los propios personajes que se va encontrando el protagonista le dan las claves para continuar con su camino".

El escritor y periodista de HERALDO DE ARAGÓN presentó ayer en la librería Anónima de Huesca su último trabajo, con ilustraciones del argentino afincado en Siétamo, Javi Hernández, con el que Castro dice tener "mucha química". El acto contó con música en directo y la presencia de la directora del máster en lectura, libros y lectores infantiles y juveniles de la Universidad de Zaragoza, Rosa Tabernero, y el vicerrector del campus oscense, José Domingo Dueñas, que alabaron la obra del autor.

"Es una narración infantil de aventuras, pero también es un homenaje a las bibliotecas y al acto de la lectura", explica el escritor, ya que el protagonista encuentra en los propios libros y en el cuento que está viviendo las claves para resolver su preocupación. "De hecho, un personaje muy importante en la historia es un sabio de la aldea, que va escribiendo libros que sirven como guía al niño. Además de una especie de biblioteca, o lugar con muchos libros, que es donde encuentra la clave final para dar con el nubeiro", aclara Castro.

Su Galicia natal ha sido la principal inspiración para el escritor, que originalmente publicó el libro en gallego, siendo finalista de los premios Merlín de literatura infantil y juvenil. "Fui construyendo la historia en los meses que viví en Sanxenxo, durante los viajes que hacía a diario a La Coruña". Las numerosas leyendas con las que cuenta el territorio son la base de algunos de los personajes, que se recogen en un ‘bestiario’ al final de la publicación, al más puro estilo de Borges. "Se desglosan todos los animales que aparecen en la historia, tanto los reales como imaginarios, que no son inventados, sino procedentes de la cultura y tradición de muchas aldeas de Galicia", explica el autor.

Respecto a su preferencia por la literatura infantil, Castro afirma que "es un placer escribir para este público, a la vez que implica una exigencia máxima, porque son niños pero no tontos. A mi me gusta pensar que estamos sembrando lectores para el futuro".