ERC acepta ahora negociar unos presupuestos "más sociales" con CiU

CiU redobló ayer su presión sobre ERC para hacer posible que Cataluña pueda contar con unos presupuestos en 2015, mientras los republicanos, que mantienen el suspense sobre si presentarán o no una enmienda a la totalidad, se mostraron abiertos a negociar unas cuentas "mucho más sociales".

El portavoz de ERC en el Congreso, Alfred Bosch, admitió que hay "conversaciones" entre ambas fuerzas políticas para intentar llegar a un acuerdo antes de que el Parlamento catalán vote el miércoles las enmiendas a la totalidad a las cuentas. "Nosotros siempre intentamos tener unos presupuestos sociales: lo intentamos en Barcelona, donde conseguimos partidas especiales para los discapacitados y para la vivienda social; lo intentamos en Madrid, donde fue imposible porque nos encontramos con un muro; y lo intentamos también en los presupuestos de la Generalitat", remarcó Bosch. No obstante, ERC desvelará mañana si decide presentar una enmienda de retorno a los presupuestos de la Generalitat.

Desde las filas de CDC, su portavoz, Mercè Conesa, hizo ayer un "último llamamiento a ERC", que extendió al PSC, para que le ayude a sacar adelante los presupuestos y, en un intento de ablandar a los republicanos, comentó: "Han sido unos socios absolutamente fiables en estos dos años de legislatura". Al mismo tiempo, Conesa valoró la disposición de ERC a negociar y a entrar a analizar los "pros y los contras" de las cuentas elaboradas por el departamento de Economía y Finanzas.

Fin de ciertas inversiones

Entre tanto, el ‘Govern’ ha elaborado un documento de trabajo interno en el que, con el fin de presionar a los republicanos, avisa de que no aprobar los presupuestos supondría dejar de invertir 458 millones en infraestructuras en Cataluña.

El Gobierno de la Generalitat advierte asimismo de que, si no logra sacar adelante las cuentas, no podrá garantizar la recuperación de la paga extra para los funcionarios ni el retorno a los interinos del cien por cien de sus salarios, y que también se paralizaría la construcción de la L9 del Metro o no se convocarían nuevas oposiciones.

Por su parte, el secretario general de Unió, Ramon Espadaler, recordó que el ‘Govern’ puede prorrogar los presupuestos de 2014 si no tiene un apoyo suficiente para aprobar las cuentas de 2015 y añadió que, en tal caso, no sería necesario adelantar elecciones, como plantean algunos partidos como Convergència.

De esta forma, UDC insiste en su tesis de que el ‘Govern’ debe agotar la legislatura, lo que contrasta con el plan de Artur Mas de convocar elecciones anticipadas de carácter plebiscitario, siempre que sea con una lista unitaria junto a ERC.

No obstante, UDC también apeló a la "responsabilidad" de ERC, partido al que recordó que, sin cuentas, se abocaría al Gobierno de Artur Mas a una situación "compleja" desde la perspectiva de inversiones o bien se impediría convocar plazas públicas.