Rescatados por la noche 2 escaladores en Riglos y una montañera en Respomuso

Equipos de Rescate de la Guardia Civil han procedido durante la pasada noche al rescate de dos escaladores leridanos que habían quedado enriscados en los Mallos de Riglos y a una montañera vasca que se había precipitado por un barranco cuando descendía del refugio de Respomuso en el Pirineo oscense.

En la primera intervención, de la que se recibió aviso a las 19.37 de este domingo, participaron agentes del Equipo de Rescate en Montaña de Huesca, quienes acudieron en auxilio de dos escaladores que se habían quedado enriscados en una zona próxima al Mallo Frechín, en la zona de los Mallos de Riglos.

Debido a la falta de luz los agentes tuvieron que realizar el ascenso a la cima a pie y en malas condiciones climáticas debido al fuerte viento, por lo que no pudieron llegar hasta el punto donde se encontraban los deportistas hasta las 22.00, informan fuentes del instituto armado en una nota de prensa.

Los escaladores, una mujer de 31 años y un hombre de 36 vecinos de Lleida, estaban ilesos, pero debido a algún contratiempo en la escalada se les hizo de noche y desconocían la ruta para bajar del Mallo, por lo que decidieron pedir ayuda.

Finalizado el descenso, que realizaron asegurados con cuerdas, los montañeros fueron trasladados a su vehículo ya que se encontraban en buenas condiciones físicas.Otro rescate en el refugio de Respomuso

Paralelamente, el equipo de rescate en montaña de Panticosa junto con la Sección de Montaña de Jaca y médico de 061, acudieron a rescatar a una mujer de 58 años y vecina de San Sebastián que se había precipitado a un barranco de considerable altura cuando descendía del refugio de Respomuso en compañía de otros cinco montañeros.

La mujer, según explicaron los compañeros de la accidentada, había tropezado y caído rodando por una ladera, hasta llegar a un cortado de unos 20 metros y precipitarse en una poza de agua al fondo del barranco. Tras descender al lugar los agentes procedieron a atender a la herida, quien sufría múltiples traumatismos y una hipotermia importante, por lo que fue abrigada con las ropas de los especialistas.

Debido a la dificultad del terreno para evacuar a la accidentada del interior del barranco, a unos cuarenta metros de altura, con frío intenso y riesgo de caída de piedras desde la parte alta del barranco, el equipo de rescate instaló un sistema de cuerdas y contrapesos para realizar la evacuación.

Tras más de dos horas se consiguió izar a la herida hasta una senda, donde debido al grado de hipotermia que sufría instalaron un punto caliente para subir su temperatura antes de iniciar su traslado a pie en la camilla hasta el aparcamiento de La Sarra, donde esperaba una UVI móvil. Tras una hora de porteo a hombros en torno a las 02.45 horas se transfirió a la accidentada a la UVI que la trasladó al Hospital San Jorge de Huesca.