El Ayuntamiento bate récords de recaudación con la plusvalía y ya alcanza los 51,8 millones

A la espera del cierre del ejercicio, los ingresos están un 43% por encima de lo presupuestado y superan los de 2013

El concejal de Hacienda, Fernando Gimeno, y el alcalde Belloch, en el pleno del pasado martes.
El Ayuntamiento bate récords de recaudación con la plusvalía y ya alcanza los 51,8 millones
Oliver duch

El Ayuntamiento batirá este año 2014 todos los récords de recaudación del impuesto sobre la plusvalía. A la espera de que se cierre el ejercicio, cuya liquidación elevará la cifra, y con datos de la semana pasada, las arcas municipales han ingresado por este tributo 51,82 millones de euros, la cifra más alta en la historia municipal. Supera en un 6,4% lo recaudado en 2013, cuando se alcanzaron 48,70 millones. Y, por supuesto, rebasa en un 43% los 36 millones previstos por el gobierno municipal para todo el ejercicio. Las bonificaciones que puso en marcha este año el PSOE para aplacar las críticas recibidas por la subida de este impuesto no han tenido el más mínimo impacto. Todo lo contrario, el tributo sigue subiendo.


El impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana, también conocido como la plusvalía, es un tributo que se liquida en los casos de ventas de inmuebles, usufructos, donaciones y herencias. Como se calcula sobre el valor catastral del suelo, ha sufrido las consecuencias de la revisión que se produjo en el año 2013 y que duplicó los recibos (hay casos en los que se ha llegado a sextuplicar). De media, la plusvalía supone unos 3.100 euros en las compras de pisos y unos 1.200 en las herencias.


El catastrazo disparó la recaudación: si en 2012 el Ayuntamiento de Zaragoza había ingresado 24,4 millones de euros, al final del ejercicio 2013 se alcanzaron los 48,7 millones. En los años anteriores, la recaudación había oscilado entre los 21 y los 25 millones de euros (ver gráfico adjunto). El aumento de los ingresos por plusvalía se ha ido evidenciando a lo largo del ejercicio: en junio ya se habían girado recibos por valor de 23,8 millones de euros y en septiembre, con 38,3 millones, se habían cumplido las previsiones para todo el año.

Sin descuento del 40%

Pero no solo ha sido la revisión de valores lo que ha propiciado esta situación, sino que el gobierno municipal ha querido aprovecharla en su máxima intensidad. Pese a tener la opción de haber mitigado el impacto de la revisión catastral mediante una reducción del 40%, que podía alcanzar el 60% en los primeros 5 años, el gobierno municipal no lo hizo. Estas rebajas eran obligatorias por ley hasta 2012, año en que se convirtieron en opcionales. Y a ese cambio legal se aferró el PSOE. La situación suscitó numerosas quejas tanto de las organizaciones empresariales como de particulares, que comprobaron cómo este tributo se convertía en una losa en ocasiones inasumible.


Este asunto incluso acabó en los tribunales. De los distintos pleitos impulsados en los últimos dos años, en un caso hubo una sentencia condenatoria al Ayuntamiento. La decisión judicial dio la razón en 2013 a una empresa que recurrió porque consideraba que no procedía que le cobraran el tributo en una operación de compraventa al no haber incremento patrimonial: los inmuebles se vendieron por un precio notablemente inferior al de adquisición.


Para aplacar las críticas, el gobierno municipal planteó una serie de bonificaciones de cara a 2014 que no han tenido el más mínimo impacto. En concreto, en las transmisiones mortis causa se estableció un descuento del 75% si el valor catastral del suelo era inferior o igual a 40.000 euros. Si el valor del inmueble oscilaba entre 40.001 euros y 70.000, el descuento se quedaba en el 45%. Hasta 2013 el descuento que se aplicaba era del 50% si el valor catastral del suelo es inferior o igual a 33.400 euros. El inapreciable impacto de las bonificaciones ha sido asumido por el propio gobierno, que en cualquier caso achaca el fenómeno recaudatorio de la plusvalía a un incremento de la actividad económica.

Los desahuciados no pagarán

De cara a 2015, no se prevén modificaciones, más allá del cambio aprobado en el último pleno municipal para incorporar la modificación legislativa impulsada por Gobierno central para que los afectados por ejecuciones hipotecarias de una vivienda habitual no tuvieran que abonar la plusvalía. No en vano, en el pleno se rechazaron las alegaciones de Cepyme, CEZ y Cámara, así como de la Federación de Empresas de la Construcción de Zaragoza. Para el próximo ejercicio, el Ayuntamiento de Zaragoza ha presupuestado unos ingresos por plusvalía de 44 millones, muy por encima de los 36 previstos inicialmente para este, pero lejos todavía de las cifras de recaudación que se están obteniendo.