Un triunfo para rozar el liderato

Un CAITeruel en horas bajas recibe al modesto L’Illa Grau en Los Planos

Carreño da instrucciones a sus jugadores.
Un triunfo para rozar el liderato
antonio garcía/bYkofoto

Un CAI Teruel en horas bajas tras acumular dos derrotas consecutivas –una en Superliga contra el Cajasol y otra en Champions contra el Marek búlgaro– recibe hoy al L’Illa Grau castellonense en el pabellón Los Planos a partir de las 18.00. Los turolenses, que han tropezado dos veces en la misma piedra al ceder en los dos últimos choques por la mínima en apretados ‘tie break’, tendrán que recomponerse sin apenas tiempo tras el partido contra el Marek del pasado viernes para enderezar el rumbo en la máxima competición nacional.


El CAI, vigente campeón de la Superliga, ocupa un inesperado tercer puesto en la clasificación. Aun así, parte como favorito frente al L’Illa Grau, que es penúltimo con 4 puntos de ventaja sobre CDV Textil, Emevé y VP Madrid, empatados en la cola con 4 puntos. Sin embargo, la diferencia clasificatoria no permite a los turolenses ninguna relajación. También se perfilaban como candidatos a una victoria cómoda frente al Cajasol, un equipo que navega en la zona media de la tabla, y acabaron perdiendo por 3-2.


En caso de ganar, el CAI podría colocarse segundo en la clasificación dependiendo de lo que haga el Ushuaïa Ibiza y tras la estela del imparable Unicaja Almería, invicto en la presente temporada. Los almerienses lo tienen todo a favor para seguir líderes en solitario porque enfrente tendrán al Emevé, uno de los rivales más flojos de la competición.


Una de las claves del partido CAI-L’Illa Grau será la situación mental de los jugadores del CAI Teruel, tocados anímicamente tras dos derrotas en el ‘tie break’. El entrenador turolense, Carlos Carreño, reconoció que el peor enemigo del equipo es su frágil moral. Afirmó, no obstante, que la escuadra local saldrá a la pista con el único pensamiento de llevarse los tres puntos en disputa.


Otro inconveniente para los caístas es la precipitada marcha del central brasileño Lucas Ferreira, que ha descompensado la plantilla ante la ausencia de un sustituto de garantías para su posición.


Carlos Carreño definió al rival de hoy como un equipo «peleón» que ha sabido sacar el máximo partido de su plantilla, en la que destaca un viejo conocido de la afición turolense, Marcos Dreyer, que en la pasada temporada vistió la camiseta caísta.