Nace 'Lindano No' para dar voz a los 60.000 afectados por la contaminación del Gállego

La nueva plataforma social pretende aunar apoyos para exigir a las administraciones una solución definitiva al problema.

Imagen del movimiento 'Lindano No'
Nace 'Lindano No' para dar voz a los 60.000 afectados por la contaminación del Gállego
Javier Blasco

Vecinos, empresarios y representantes políticos han creado el movimiento ‘Lindano No’, que pretende aunar las voces de los 60.000 personas afectadas o amenazadas por la presencia de este pesticida tóxico en las aguas del río Gállego con el objetivo de presionar al Gobierno de Aragón, al Gobierno de España e incluso a la Unión Europea para que den una solución definitiva “a este grave problema de contaminación que estamos pagando con nuestra salud, nuestra agricultura, nuestra ganadería y nuestro turismo”, como explicó Inés Dewulf, vecina de Biscarrués, gerente de una empresa de aguas bravas en Murillo de Gállego y portavoz de este movimiento.


Esta nueva plataforma popular y social “y sin tintes políticos” ha sido presentada públicamente este martes en la Diputación Provincial de Huesca con la presencia de vecinos, empresarios turísticos, agricultores y alcaldes de varias poblaciones afectadas como Almudévar, Santa Eulalia de Gállego, Biscarrués, Murillo de Gállego o Ardisa. Entre sus objetivos está conseguir abastecimientos alternativos, “porque hay pueblos que hoy por hoy siguen sin tener agua de boca”; la descontaminación total del río “y no solo con buenas palabras sino con presupuestos; una información transparente por parte de las administraciones implicadas “porque es muy difícil obtener los resultados de los controles del agua de boca”; o realizar estudios sobre la salud de las personas que han estado bebiendo agua del Gállego en los últimos 30 años.


El primer paso de este movimiento será intentar recabar el apoyo de asociaciones vecinales, empresariales, turísticas, agrarias o ecologistas “para tener representatividad y presionar a las administraciones”. Además, crearán diferentes comisiones de trabajo sobre abastecimientos alternativos, descontaminación, afecciones, seguimiento de los análisis de agua y comunicación. Por último, lamentaron el escaso eco que está teniendo el problema a nivel nacional, algo que achacaron a que “las administraciones han querido acallarlo porque de hecho ni el Gobierno aragonés ni el español han pedido dinero a Europa, lo cual es muy preocupante”.