De Guindos prefiere no opinar sobre las responsabilidades de Blesa en el caso de las tarjetas

El ministro de Economía ha evitado hablar sobre el caso de corrupción en Caja Madrid.

Luis de Guindos, ministro de Economía.
De Guindos prefiere no opinar sobre las responsabilidades de Blesa en el caso de las tarjetas
Heraldo.es

El ministro de Economía, Luis de Guindos, declinó este viernes opinar sobre la posible responsabilidad del expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa en el caso de las tarjetas opacas de la entidad.


Preguntado por las informaciones publicadas en el diario "El Mundo" que señalan que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) apunta a Blesa como "autor" del sistema de tarjetas opacas que habría permitido a varios consejeros cargar supuestos gastos personales a las cuentas de la entidad, De Guindos rechazó hacer comentarios.


"El FROB tiene instrucciones de cumplir la legalidad, colaborando con la justicia y la fiscalía y haciendo planteamientos al respecto, pero yo en eso no les puedo decir absolutamente nada", respondió De Guindos.


La justicia española investiga la existencia de estas tarjetas al margen del circuito general con las que 86 ex miembros de la cúpula de Caja Madrid gastaron 15,25 millones entre 1999 y 2012, después de que la Fiscalía Anticorrupción considerara que apreciaba indicios de delito societario y de apropiación indebida.


Los hechos fueron denunciados por el FROB, el principal accionista de Bankia, entidad a la que dio lugar Caja Madrid tras su fusión con otras cajas.


Entre los gastos realizados por los exconsejeros y exdirectivos de Caja Madrid destacaban 3 millones de euros en restaurantes, 2 millones en disposiciones de efectivo, más de 1,5 millones en desplazamientos y viajes, más de 1 millón en grandes superficies, cerca de 800.000 euros en hoteles y unos 700.000 euros en ropa y complementos.


En total 86 personas -65 miembros del consejo de administración y de la comisión de control y 21 consejeros ejecutivos y directivos- se beneficiaron de estas tarjetas, gestionadas directamente por Sánchez Barcoj, ex director general de Caja Madrid y "mano derecha" del expresidente de la entidad Miguel Blesa.


El escándalo también ha salpicado al ex ministro y ex director del Fondo Monetario Internacional, Rodrigo Rato, que fue ex presidente de Bankia.

Acuerdos de Luxemburgo


El ministro de Economía, Luis de Guindos, se ha mostrado también "convencido" de que la Agencia Tributaria está investigando si hay intereses españoles afectados por los acuerdos fiscales ventajosos que Luxemburgo tiene con centenares de multinacionales y que fueron filtrados esta semana.


"Estoy convencido de que la Agencia Tributaria, dentro de su independencia, lo está haciendo ya", ha declarado De Guindos en una rueda de prensa en Bruselas, al ser preguntado por si el Gobierno estudiaba indagar en la información filtrada este jueves sobre el caso luxemburgués.


El ministro ha dicho que es pronto para estimar el impacto de estos acuerdos con multinacionales, porque hasta ahora "se desconocía por el gran público", y ha recalcado la importancia de aclarar si los pactos eran "públicos o no" y si se trata de un instrumento "distorsionante".


Aunque el ministro ha evitado calificar el caso concreto de Luxemburgo, sí ha dicho que desde el punto de vista "genérico" es "inadmisible" que se utilicen instrumentos fiscales para distorsionar la competencia dentro de la Unión Europea.


También ha concedido que es "difícil de explicar" a los ciudadanos que se ofrezcan ventajas fiscales a grandes empresas, mientras se imponen recortes a nivel nacional.


"Se va a hacer un análisis de si el instrumento en concreto es distorsionante o no. Es una noticia importante, una noticia relevante, porque está afectando a la reasignación de beneficios dentro de la Unión Europea. Y hay que evitar este tipo de planteamientos", ha explicado el ministro español, que, sin embargo, ha pedido prudencia hasta conocer las conclusiones de la investigación abierta por la Comisión Europea.

De Guindos no ha querido ahondar en este asunto porque, según ha dicho, sería una "frivolidad" dar una opinión sobre información publicada un día antes y ha pedido "esperar a los hechos".