La DGA aumenta las sanciones en relación con la pesca en Mequinenza y Ribarroja

Las sanciones se han incrementado un 15% sobre el año 2013 y más del 100% sobre los de 2011.

El aumento de la vigilancia en los embalses de Mequinenza y Ribarroja para detectar infracciones relacionadas con la pesca han generado que se incrementen de manera importante las sanciones aplicadas, que hasta el 31 de julio ascendían a 643 expedientes.


Estos expedientes son el resultado de las tareas de inspección y vigilancia, tanto desde la orilla como desde embarcaciones, por parte de la Guardia Civil (298 expedientes), Agentes de Protección de la Naturaleza del Gobierno de Aragón (144 expedientes), guardas de campo (188 expedientes), personal de otras dependencias y servicios del ejecutivo (5), y de otras administraciones (8).


Los expedientes sancionadores se han incrementado un 15% sobre el año 2013 y más del 100 % sobre los abiertos en 2011, apuntan en una nota fuentes del gobierno autonómico.


Los tipos de infracción más frecuentes son pescar sin licencia o sin permiso del coto en Ribarroja, pescar con artes ilegales, pescar con más cañas de las autorizadas, pescar fuera de horarios autorizados, cebados ilegales de aguas, uso de rejones para mantener los peces, tenencia de especies exóticas vivas e incumplimiento de la normativa de navegación y de desinfección de embarcaciones y elementos.


Asimismo, son frecuentes las acampadas ilegales y uso del fuego ligado a esas acampadas.


En cuanto a redes, anualmente se retiran y eliminan del embalse numerosas redes de las que no se llega a descubrir la titularidad o responsabilidad sobre las mismas.


En 2013 se extrajeron y eliminaron 46 tramos de redes, cada una con una longitud mínima de unos 50 metros, aunque en ocasiones superan los 100 metros.


Además, son habituales los decomisos de pequeñas redes, rejones y viveras usadas para la captura y tenencia de peces para cebo o de las especies pescadas en vivo, elementos de los que se decomisaron 152 el año pasado.


Los embalses de Mequinenza y Ribarroja regulan los caudales del Ebro sobre terrenos pertenecientes a tres comarcas aragonesas: Ribera Baja del Ebro, Bajo Aragón-Caspe y Bajo Cinca, suelos que, a su vez, se reparten entre siete municipios: Sástago, Escatrón, Chiprana, Caspe, Mequinenza, Fayón, todos ellos de la provincia de Zaragoza, y Fraga (Huesca).