El Gobierno da marcha atrás en la ley de Parques Nacionales, con poca afección en Ordesa

El valle aragonés cuenta con escasos terrenos privados. El Ministerio tendrá más competencias.

Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido
El Gobierno da marcha atrás en la ley de Parques Nacionales, con poca afección en Ordesa
C.H.T.

La polémica generada en las últimas semanas y la presión de los colectivos ecologistas y de la mayoría de los partidos en la oposición han hecho que el PP retroceda en las enmiendas presentadas al Anteproyecto de Ley de Parques Nacionales. Unas propuestas que abrían la puerta, por ejemplo, a las actividades cinegéticas y a los intereses particulares en estos espacios protegidos y que ahora el Grupo popular espera reformular con la colaboración del resto de fuerzas. 


La rectificación, la enésima del Ejecutivo en los últimos meses, ha supuesto un alivio para muchos gobiernos autonómicos y, en especial, para los grupos ecologistas que veían en este proyecto una amenaza para los sistemas de protección de las 15 reservas naturales que a día de hoy forman parte de la Red de Parques Nacionales.


El anteproyecto, aprobado solo con los votos del PP a finales de septiembre, recoge modificaciones tales como el trasvase de competencias de las Comunidades Autónomas al Gobierno central, la apertura a la "colaboración públicoprivada en materia de financiación" y el reconocimiento de los derechos de los particulares.


Sin embargo, ha sido con las últimas enmiendas presentadas por el Grupo popular en el Senado, a finales de octubre, cuando la polémica se ha desatado. Una de ellas -la 278- recogía que "las administraciones públicas promoverán la celebración de acuerdos voluntarios en los casos en que la adecuación (de la norma) afecte a derechos de terceros en cuyos casos los plazos anteriores se entenderán prorrogados”. Algo que, según los grupos ecologistas, supondría la entrada de prácticas cinegéticas con la consiguiente invalidez de la prohibición anteriormente fijada de la caza en estos espacios a partir de 2017.

Ordesa y Monte Perdido, menos vulnerable


Se trata de una decisión que afectaría principalmente a parques como el de Cabañeros, entre Ciudad Real y Toledo, con una fuerte presencia de cotos de titularidad privada, y a otros sobre los que pesan presiones particulares o económicas. En este aspecto, los Parques Nacionales de montaña cuentan con particularidades que los hace, de alguna manera, menos vulnerables a esta nueva regulación. Es el caso de Ordesa y Monte Perdido.


La titularidad de las tierras de la mayor joya natural de Aragón corresponde en un 93,7% al bien público. Es decir, un 89% del Parque pertenece a los términos municipales de Bielsa, Fanlo, Puértolas, Tella-Sin y Torla y tan solo un 6,3% es de titularidad privada.


Algunos de los alcaldes afectados aseguran que, de aprobarse íntegro el texto, en el Parque de Ordesa y Monte Perdido habría, seguramente, menos afección que en otros parques ya que los terrenos privados son menos y están más esparcidos. "La superficie privada en Ordesa es insignificante", afirma Miguel Villacampa, alcalde de Torla y miembro de la Junta Rectora del Parque Nacional de Ordesa.


Asimismo, el portavoz de Ecologistas en Acción Aragón, Xesus Ferrer, opina que "en Ordesa tanto la superficie privada como los intereses privados y particulares son mucho menores que en otros parques". Unos intereses a los que se puso barrera en 1975 con la Ley de Espacios Naturales Protegidos y la ampliación de Ordesa que evitó, por ejemplo, que en los años 70 el cañón de Añisclo fuera la ubicación de una central hidroeléctrica.

Madrid gestionará Ordesa


"La rectificación del PP ha supuesto un paso adelante para evitar que los Parques Nacionales pierdan protección ante las propuestas privadas", añade Ferrer. Las nuevas condiciones del juego tampoco han contentado a todos los Gobiernos Autonómicos que ven cómo, de seguir así, perderían algunas de las competencias adquiridas en 2006, después de que el Tribunal Constitucional así lo dispusiera. 


Desde el departamento de Medio Ambiente del Gobierno de Aragón, aseguran que "hay que esperar a su aprobación definitiva porque puede haber cambios", no obstante apuntan que "de aprobarse tal cual la propuesta, supondrá asumir cambios en la gestión en la que podría tener más participación el Ministerio". 


Los grupos de la oposición tampoco han tardado en criticar el nuevo texto que, según CHA, "abre la puerta a todo tipo de actividades poniendo por delante de la protección y la conservación la realización de todo tipo de actividades en ellos”.