"Van pocos a prisión porque la estafa a la administración tiene penas ridículas"

La nueva unidad especial contra la corrupción tendrá como coordinador al fiscal Javier Checa, con 29 años de trayectoria profesional, 9 de ellos en Zaragoza. Se encargó del caso Mallén, pero ahora asumirá todos los relacionados con corruptelas y estafas en el ámbito público. "Van pocos a prisión porque las estafas a la administración tienen penas ridículas", confiesa cuando se le pregunta por la sensación de impunidad que tiene el ciudadano.

Para Checa, la Justicia debe ganar agilidad en este tipo de procedimiento y evitar que, como ocurre con la trama de La Muela, terminen eternizándose. "Las causas tienen que ser cortas y cuanto menor sea el número de imputados, mejor", dice, mostrándose partidario de las piezas separadas.

Reconoce Checa que "de momento" no son muchos los casos de corrupción que existen en Zaragoza. "No hablamos de más de diez", asegura. Recuerda que se trata de temas económicos en los que "lo que importa son los papeles y la documentación". De hecho, entiende que, a veces, estar presente en la declaración de un imputado que no está obligado a decir verdad aporta poco. Admite que sus medios no son los de la Fiscalía Anticorrupción de Madrid, pero ofrece a cambio "esfuerzo y dedicación".