El consejero Lobón informó ayer de que los últimos análisis reducen el nivel de lindano en los embalses de La Peña, Ardisa y en Camarera, aunque siguen por encima de los límites marcados. Además, señaló que en estas pruebas se ha descartado que haya nuevos núcleos afectados. Lobón indicó que "lentamente, pero parece que el río se va descontaminando". "El pantano de La Peña se va limpiando, igual que en Ardisa ha bajado la contaminación y también en Camarera". 

Además, informó que ayer se tomaron nuevas muestras y que el resultado se sabrá previsiblemente antes del fin de semana. "Si el río mantiene la tendencia que se está viendo ahora y se confirma el viernes, es muy posible que ese día Sanidad pueda hacer sus estudios, ya que los filtros estarán todos puestos". Según aseguró, "el más complejo", en referencia al de Villanueva, también lo estará e incluso no descartan que alguno se pueda adelantar.

El problema de la contaminación de las aguas del Gállego se arrastra desde hace décadas y periódicamente ha habido episodios que han aumentado su concentración. Ocurrió en 2006 (lo que hizo al Gobierno aragonés impulsar la construcción de la nueva vasija) y también en 2010, año en el que hubo dos desbordamientos en la vasija anterior. Las labores de traslado al nuevo vaso de Bailín se inició el pasado mes de mayo y el movimiento de tierras concluyó en septiembre. Ahora se última el sellado provisional.