El Cipotegato salta a la gran pantalla con 'Bendita calamidad'

Ayer comenzó en Tarazona el rodaje de nuevas escenas para recrear la popular fiesta que se celebra cada 27 de agosto, con el actor Juan Muñoz y una treintena de extras

Gaizka Urresti, a la izquierda, supervisa el rodaje de la escena delante de la puerta del Ayuntamiento de Tarazona.
El Cipotegato salta a la gran pantalla con 'Bendita calamidad'
Fernando Orte

La plaza de España de Tarazona se convirtió ayer en un escenario de película. Gaizka Urresti y todo el equipo de ‘Bendita calamidad’ están en la capital del Moncayo rodando nuevas escenas para el largometraje, cuyo rodaje prevé finalizar el 5 de septiembre. Las más llamativas son las que recrean la popular fiesta del Cipotegato, para las que cuentan con numerosos extras que se visten con la indumentaria típica del 27 de agosto: ropa blanca, pañuelo y faja azules. Mañana, jueves, será cuando mayor número de personas acudan a la plaza, pero ayer ya se grabaron las primeras tomas en un ambiente festivo.


En concreto, el momento en el que la Policía Municipal intenta controlar a la multitud para que no dañe la fachada del ayuntamiento. Pero el que sí sale dañado es precisamente el jefe de la policía, Isidro, papel que interpreta Juan Muñoz, ex del dúo Cruz y Raya. «Llevo cuatro tomatazos en el lado izquierdo de la cara», decía con humor en el descanso. También se grabó la escena de la conexión en directo de la reportera de Aragón Televisión en la que informa «de que los turiasonenses están compungidos por el secuestro del obispo cuando realmente la fiesta continúa como si nada», según relató Gaizka Urresti. El cineasta destacó la complejidad que conlleva el rodaje debido a que tiene que «casar los planos con los que grabamos hace tres años». 


A los cinco actores –además de Muñoz, Carmen Barrantes, Chavi Bruna, Ibán Naval y Alfonso Palomares– y las 24 personas del equipo técnico –entre los que está el turiasonense Adrián Barcelona, ayudante de cámara–, se sumaron de forma desinteresada una treintena de figurantes. Entre ellos, Samuel Bona, que participaba por primera vez en un rodaje. «Es una secuencia en la entrada del Ayuntamiento, y tenemos que cantar Cipote, Cipote, pero sin hablar, es bastante raro», comentó. La joven Nerea Calvo sí conocía los entresijos de una grabación, gracias al taller de cortos del festival de cine, pero nunca había actuado. «Es gracioso y encima manchados de tomate», dijo. Extras por ayudar a financiar

También hubo extras que consiguieron hacerse un hueco en la película por contribuir a su financiación. «Estoy aquí porque mi hijo participa en una de las secuencias del rodaje de hoy y he venido desde Zaragoza a traerlo. Hemos colaborado en el ‘crowdfunding’ que a partir de cierta cantidad daba derecho a tener un pequeño papel», explicó Manuel Aparicio.


Las grabaciones continuarán en Tarazona hasta el próximo sábado y después se trasladarán a otros lugares de la comarca. «Además del impacto económico directo en la zona que supone el rodaje, la mayor repercusión será la publicitaria porque la película es un spot de Tarazona ciudad y de todo el Moncayo», aseguró Malena Carreras, jefa de producción de la película.