Los partos caen un 16% en cinco años por la crisis y la marcha de inmigrantes

En lo que va de año ha habido 137 alumbramientos menos que en el mismo periodo de 2013

Francisca con su hijo Asier, en el Hospital Clínico de Zaragoza donde dio a luz.
Francisca con su hijo Asier, en el Hospital Clínico de Zaragoza donde dio a luz

Aunque todos los expertos coinciden en que la tendencia de nacimientos se estabiliza, la cifra de partos en lo que va de año refleja una caída de alumbramientos respecto al año pasado. Desde enero hasta principios de mayo de 2014, los hospitales aragoneses han registrado 2.783 nacimientos, cuando en el mismo periodo del año pasado se llegó a los 2.920. La comparativa todavía es más drástica si se retrocede a 2010, cuando en ese mismo tramo del año se llegó a los 3.237 (un 16% más). Sin embargo, los especialistas advierten de que hay que ser cautos y esperar a final de año para hacer un balance definitivo.


Lo que está claro es que atrás quedó el ‘boom’ de alumbramientos que coincidió con los años de bonanza económica y la mayor presencia de inmigrantes. La llegada de la crisis frenó los embarazos de manera significativa. Según datos facilitados durante los últimos años por el Servicio Aragonés de Salud, de los 3.237 partos (vía vaginal y cesárea) que se atendieron hasta mayo en el año 2010 en los hospitales públicos aragoneses, se pasó en ese mismo periodo a 3.149 en 2011; 3.057 en 2012; 2.920 en 2013 y 2.783 en 2014.


Por hospitales, vuelven a ser el Miguel Servet y el Clínico de Zaragoza los que más parturientas han asistido de momento. Mientras el primero sumó 1.284 (1.309 en el mismo periodo de 2013), el Lozano Blesa contabilizó 702 (los mismos que el año pasado). No obstante, los especialistas aseguran que hay que esperar hasta final del año para hacer un cómputo global, ya que los meses de verano suelen ser de mucha actividad. De hecho, así ocurrió en 2013, que pese a tener un comienzo de año bastante comedido, se alcanzaron finalmente los 10.951 nacimientos (cuando en 2012, fueron 10.645).


La bajada ha sido tan importante en los últimos años, que los expertos intentan transmitir optimismo de cara al futuro próximo. El Decano del Colegio de Ciencias Políticas y Sociología de Aragón, Carlos Gómez Bahillo, confía en que se salga de la situación económica actual y se vuelvan a producir asentamientos de inmigrantes.


Recuerda que lo que frenó la caída de población fue la marcha de extranjeros, ya que la tasa de fecundidad de la mujer aragonesa se ha mantenido más o menos siempre estable en 1,3 hijos. "A principios de los 90 la población ya se había estabilizado y lo que consiguió mantenerla fueron las mujeres inmigrantes con tasas de reproducción superiores", destaca el Decano del Colegio de Sociólogos de Aragón.


El experto espera que la situación mejore, ya que explica que una bajada notable de la natalidad acarrea "repercusiones económicas importantes", porque los inmigrantes influyen en "las arcas de la Seguridad Social" y en fomentar un mercado de trabajo joven.


El especialista en Ginecología y Obstetricia del Hospital Clínico de Zaragoza Pedro González recuerda que el bajón importante de nacimientos se produjo, según su opinión, hace cuatro años y, ahora, al menos en este centro sanitario, la situación está estabilizada. Tampoco se muestra optimista con que la natalidad aumente significativamente en los próximos años. "Aunque digan que estamos saliendo, hasta que las parejas no lo tengan más tangible no se animarán", apuntó el especialista.


No obstante, hace hincapié en que la disminución de partos no tuvo tanto que ver con el éxodo de inmigrantes sino con la tendencia general por la situación económica, que afecta a todos por igual.