Las diócesis aragonesas recibieron casi 11 millones de euros de la Conferencia Episcopal Española (CEE). Fue gracias a la recaudación total que consiguió la Iglesia en España a través de la casilla del Impuesto de la Renta sobre las Personas Físicas (IRPF) del año 2012 y de la liquidación de este impuesto correspondiente al ejercicio 2010.

Ese año, hasta nueve millones de personas en toda España marcaron la 'X' a favor de la Iglesia en su declaración de la Renta, según los datos de la Memoria Anual de Actividades del año 2012 de la Conferencia Episcopal Española (CEE), presentada esta semana.

El gesto de estos contribuyentes se tradujo en 248,3 millones de euros. De esta cantidad, algo más de 197,7 millones fueron a parar a las 70 diócesis para sufragar sus "necesidades generales".

Cerca de 11 millones llegaron hasta Aragón a través de las diócesis de Zaragoza, Huesca, Teruel y Albarracín, Tarazona, Jaca y Barbastro-Monzón. La que más dinero recibió, casi 4,5 millones, fue la de Zaragoza. 

Según la CEE, "la asignación tributaria aporta un 25% a la financiación básica de las diócesis" aunque este porcentaje "varía mucho según el tamaño de cada una de ellas", admiten, y en las más pequeñas puede llegar a alcanzar "el 70% de sus recursos".  

Tras Zaragoza, la diócesis que más dinero recibió fue la de Teruel, con una transferencia cercana a los 1,7 millones. Les siguen Barbastro-Monzón (1,3 millones), Tarazona (1,27) y Huesca (1,21). Jaca fue la que menos recursos derivados del IRPF ingresó, con 994.000 euros. 

La crisis económica está pasando factura a la Iglesia, ya que la institución percibe unos 2,6 millones de euros menos que hace cinco años. Madrid, Andalucía y Cataluña son las comunidades que más recursos aportan.

Seguridad Social, actividades pastorales...

"Es un sencillo gesto que no cuesta nada y que, sin embargo, (...) rinde mucho", reza la memoria de la Conferencia Episcopal. Además de a las diócesis, lo ingresado a través de la 'X' de la declaración también se destinó a pagar cuotas de Seguridad Social, proyectos de rehabilitación y construcción de templos o transferencias a Cáritas.

En 2012, las transferencias a esta organización caritativa y humanitaria vinculada a la Iglesia ascendieron a cinco millones de euros, uno más que un año antes. Los pagos a la Seguridad Social tanto del clero como de los obispos supusieron 16,1 millones, mientras que para la rehabilitación y la construcción de templos se destinaron 6,2 millones.

Por su parte, el pago de todas las retribuciones de los obispos alcanzó los 2,1 millones y sufragar las actividades pastorales en el extranjero costó 1,2 millones. 

Las diócesis españolas atendieron a un 25% más de población en riesgo de exclusión que un año antes. La cifra de españoles que reciben algún tipo de asistencia de la Iglesia se sitúa, según los datos de la institución, en 2,25 millones de personas a las que se les ayuda a pagar sus facturas o se les da alimentación, ropa o algún tipo de apoyo.