Los empresarios valencianos han reiterado su intención de no abandonar las reivindicaciones para modernizar la línea que enlaza esta comunidad con Zaragoza a través de Teruel, por considerar la infraestructura "necesaria y trascendental" para el desarrollo de los territorios por los que discurre. El presidente de la Fundación Pro AVE –entidad creada por estos empresarios para reclamar mejores comunicaciones–, Federico Félix, considera "urgente" acometer una actuación que reactive la vía, cada vez menos utilizada por los viajeros.

Tras la reunión que mantuvo recientemente la Asociación de Empresarios de Valencia con la presidenta Luisa Fernanda Rudi, Félix ha retomado sus críticas por la decisión del Gobierno de posponer un proyecto para reestructurar la línea con una inversión de 40 millones de euros. "Es comprensible –explicó el empresario– que las inversiones públicas se hayan resentido debido a la crisis, pero 40 millones es una cifra asumible frente a los 1.400 millones que se van a invertir en ferrocarril, en proyectos, muchas veces, de dudosa viabilidad económica".

El empresario valenciano señaló que sus peticiones han tenido el respaldo del Gobierno de Aragón a través de sus responsables institucionales, a los que los empresarios han visto "interés en revitalizar la línea de tren". Agregó que es un primer paso para "aunar esfuerzos, importante para lograr el objetivo". Y asegura que los empresarios están dispuestos "a hacer lo necesario para que el proyecto se lleve a cabo sin tardanza". Entre otras medidas, pretenden demostrar las veces que haga falta ante las administraciones que la línea Valencia-Zaragoza "sería rentable al día siguiente de ponerse en marcha", explicaba Federico Félix.

Además de recuperar los viajeros perdidos por las deficientes condiciones de la infraestructura férrea, la inversión de 40 millones de euros permitiría, a juicio del empresario valenciano, recobrar el tráfico de mercancías, desviado por Cataluña hace más de una década. Félix reconoció que fórmula "encarece los costes de traslado".Curvas y pendientes

Un trazado con abundantes curvas y pendientes, con ciertos tramos, especialmente los que enlazan Valencia con Teruel, cuyo límite de velocidad no puede sobrepasar los 20 kilómetros por hora, impide el paso de contenedores de cargamento pesado.

La asociación empresarial insiste en que la modernización de esta línea mejorará la conexión entre los puertos valencianos y la principal plataforma logística del sur de Europa, como es Plaza. Pero Federico Félix insiste en que una adecuada infraestructura de ferrocarril no solo beneficiará a estas dos comunidades autónomas, sino que, en su opinión, "tendrá un efecto multiplicador". "Supone –dijo– la constitución de una salida ferroviaria al Mediterráneo del norte de España, con conexiones con Navarra, Logroño y el País Vasco, donde se localiza una parte muy importante del sector automovilístico español".Límites de velocidad

El retraso de inversiones destinadas a la línea de ferrocarril Valencia-Teruel-Zaragoza es una constante. Los trabajos para reparar dos tramos próximos a la capital turolense, de 100 y 300 metros, en los que los trenes se ven obligados a circular a 20 kilómetros por hora y a 30, respectivamente, se van a demorar hasta el próximo otoño.

Falta por redactar el proyecto de uno de los tramos, y el otro ya ha salido a concurso. Los sindicatos ferroviarios han criticado repetidamente las escasas inversiones que se realizan en esta vía, en la que la práctica habitual consiste en "parchear" la red, lo que permiten mejorar ligeramente los tiempos de recorrido. Reclaman, al igual que los empresarios valencianos, una reforma integral que posibilite un incremento de la demanda de la infraestructura.

Para el presidente de la Fundación Pro AVE, además de razones económicas, hay "cuestiones políticas" que frenan actuaciones de envergadura en esta línea. "A lo mejor piensan que con el AVE de Levante y el futuro corredor del Mediterráneo, Valencia ya tiene suficiente", explicó Federico Félix