Carbonífera del Ebro, empresa que gestiona la mina de Mequinenza, en Zaragoza, ha presentado un expediente de extinción a sus trabajadores debido a su incapacidad para seguir manteniendo la actividad hasta que se decretara el cierre ordenado de la mina. El expediente, del que ya han sido informados los 33 mineros que continuaban en plantilla, será firmado en una reunión que mantendrán las partes a comienzos de la semana que viene.

La empresa ha alegado a los trabajadores falta de viabilidad para continuar adelante en el proceso de cierre de la mina, que desde el pasado mes de diciembre era efectivo al no autorizarse la venta del carbón extraído de la población zaragozana, y que ahora estaba pendiente de la concesión de las ayudas al cierre. Desde entonces, trabajadores y empresa habían mantenido varias reuniones con el Ministerio de Industria para adelantar la convocatoria de estas ayudas al cierre de minas no competitivas, a las que finalmente no concurrirán por decisión unilateral de la empresa, según explican los trabajadores.

“Llevamos 18 meses peleando juntos y no entendemos cómo ahora, que ha salido la convocatoria, le empresa se echa para atrás”, ha explicado el presidente del comité de empresa de la mina, Franciso Montull. Según estiman fuentes sindicales, las ayudas al cierre, a las que el Ministerio destinará este año 15 millones, posibilitarían la contratación de aproximadamente la mitad de la plantilla actual durante los próximos 3 años, periodo en el que se cerrarían definitivamente las entradas a la mina, se aseguraría el perímetro y se adecuaría la situación de las escombreras que la explotación de Mequinenza tiene tanto en la provincia de Zaragoza como en Cataluña.