Los militares aragoneses dan la vuelta al mundo
Los 570 militares de la Brigada de Castillejos II ya están instalados en el Líbano, mientras el Ala 31 de la Base Aérea de Zaragoza tiene desplegados dos Hércules y cien personas entre Gabón y Afganistán
El Gobierno español redujo la presencia de militares en las misiones en el extranjero desde diciembre de 2012 y se regresó a las cifras que se vivían en los años 90: un máximo de 2.400 en cinco destinos, que han crecido en dos nuevos en África, Mali y Gabón. Pero los aragoneses siempre están destinados en una u otra. El Ala 31 de la Base de Zaragoza tiene dos Hércules y un centenar de militares entre Afganistán y Gabón, mientras la Brigada de Castillejos II ya está desplegada en el Líbano.
El contingente español de la Unifil se rebajó un 40% hace dos años y la Brigada de Castillejos II llegó hace dos semanas con sus 570 efectivos. Se reparten entre la Base Miguel de Cervantes, dos posiciones mandadas por españoles, Naquora, con centros de comunicación, y en la que están los serbios con un oficial de enlace. "La calma frágil de la que siempre hablamos persiste", comentó el portavoz de la BRILIBXXI. "En las reuniones y encuentros que ya ha mantenido el general Chapa con autoridades locales, religiosas y militares, se comenta que estamos en uno de los momentos más tranquilos desde nuestra llegada en 2006", agregó.
Los niños que tenían de 4 a 8 años y hoy son adolescentes están creciendo en un ambiente menos hostil que sus padres porque está la Unifil. La situación tranquila se prueba en que las tres rotaciones que llegaron al aeropuerto de Beirut desde Zaragoza viajaron en el Líbano en autobuses, en lugar de en blindados, como ocurre en otras ocasiones. No obstante, iban escoltados por blindados con las medidas de seguridad adecuadas en la zona libanesa que ocupa la Brigada española, junto a los salvadoreños y serbios.
Hacen una media de 50 y 60 patrullas diarias. La Castillejos suele realizarlas con las Fuerzas Armadas Libanesas porque el objetivo es que se les vea más en la zona sur y vayan asumiendo su papel. Los aragoneses vigilan cualquier posible lanzamiento de cohetes y están en ‘check points’ de observación a lo largo de la Blue Line (Línea Azul fronteriza).
Otra actividad prevista es el Programa Cervantes, que se retomará en septiembre. Pero a petición de los alumnos se iniciarán los cursos de castellano en verano en 17 centros de nueve poblaciones (Marjayoun, Kleyaa, Bouj al Malouke, Deir Mimess, Ebel-es-Saqi, Chebaa, Hebbariyé, Kafer Kela, El Khiam, la Base Cervantes y Naquora)del área de responsabilidad de la BRIBLIB XXI para 200 personas. Por estos cursos han pasado casi 5.000 alumnos libaneses en siete años.Llevar material electoral
Mientras la brigada de Castillejos prepara a las fuerzas libanesas para hacerse cargo de la seguridad en la zona, un Hércules C-130 de la Base de Zaragoza del destacamento Mizar del Ejército del Aire colaboró la semana pasada transportando material electoral para los próximos comicios en Afganistán el 14 de junio.
El destacamento aragonés está compuesto por 37 personas (entre tripulaciones y mantenimiento del Ala 31) y seis miembros del Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (Eada), que son los encargados de la escolta y seguridad. En los dos viajes que hizo el Hércules entre Kabul y Herat, transportó material electoral para las provincias del oeste de Afganistán (Herat, Badhgis, Ghor y Farah). Iba la tripulación habitual junto a dos representantes del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, cuya misión es velar por la integridad y seguridad del material que se usará en el proceso electoral. Llevaron urnas, papeletas, folletos explicativos y cabinas de votación. Se quedaron custodiados en un centro oficial de Herat hasta su distribución la víspera de las elecciones.
Este destacamento, formado por un Hércules en Afganistán y otro en alerta en Zaragoza, lleva desplegado en la base de Herat desde el 13 de octubre de 2009. Proporcionan transporte aéreo nacional (hace una semana volvió de allí la Brigada de Montaña de Jaca y de la AALOG 41 de Zaragoza) y evacuaciones médicas.
Otro Hércules acudió hace dos meses a Gabón (África) para ayudar a las tropas francesas en la ‘operación Sangaris’ en la República Centroafricana, amparada por el Consejo de Seguridad de la ONU. Como pasó en Mali en 2103, la función es proteger a los civiles y restablecer la seguridad y el orden público. Unos 50 militares aragoneses estrenaron esta misión el 23 de marzo y no saben hasta cuándo se quedarán.
