En caso de desaparición, las primeras horas son clave

En Aragón, cuatro personas permanecen en paradero desconocido en la actualidad.

Cartel de Se Busca en Zaragoza
Cartel de Se Busca en Zaragoza

En los últimos meses los casos de desapariciones en Aragón han estado a la orden del día, Desde SOS Desaparecidos Aragón aseguran que son cuatro las personas de las que no hay rastro en la actualidad: Jesús, Victor, Francisca y Joaquín. A ellos habría que añadir decenas de casos sin resolver que han quedado en el olvido.


Los últimos datos publicados por el Ministerio de Interior en 2013 afirman que en los últimos tres años se han formulado 29.706 denuncias por desaparición en España, de las cuales se han resuelto más del 90%. Como explica José María Rudiez, coordinador de SOS Desaparecidos Aragón, esto significa que, a día de hoy, existen 2,400 casos sin resolver en nuestro país.


Los casos de desaparición más comunes en Aragón se corresponden con personas mayores que padecen de problemas de pérdida de memoria, desorientaciones o enfermedades como alzhéimer, según la delegación aragonesa. "Son personas que suelen aparecer pronto y a escasos metros de su casa", añade.


Tanto la coordinadora como la Policía Nacional coinciden en que el periodo que transcurre entre las primeras 24 y 48 horas resulta primordial para resolver un caso de desaparición. Fuentes de la Policía aseguran que la existencia de un tiempo mínimo para comenzar la búsqueda es "un mito", y que, en estos casos, la actuación del entorno es imprescindible: "Deben actuar cuando consideren que hay indicios suficientes de que la persona ha desaparecido de manera involuntaria".


Hay que distinguir entre las desapariciones voluntarias y las involuntarias o inquietantes, aunque, aseguran, estas últimas son las menos comunes, y producen una ruptura brusca de los hábitos cotidianos de una persona, como ocurrió en el caso de Da Silva. "Es un joven estudioso, integrado, con un grupo de amigos, que desapareció de repente sin dejar rastro", añaden.

Reconstruyendo los hechos

En cualquier desaparición, el protocolo de actuación es siempre el mismo: Una vez formulada la denuncia en cualquier comisaría de distrito se notifica al Grupo de Homicidios y Desaparecidos de la Jefatura Superior de la Policía de Aragón, que comienza por reconstruir lo ocurrido antes de la desaparición. "Se habla con el entorno y con las últimas personas que lo han visto; se localiza la señal del teléfono movil y se revisan movimientos bancarios y en redes sociales".


Además, los datos recabados se vierten diariamente en un sistema informático de ámbito nacional que llega a algunos cuerpos internacionales como la Interpol. También cuentan con las aportaciones de la colaboración ciudadana, sobre todo en la actualidad, gracias al auge de las redes sociales. Desde las asociaciones aseguran que es un apoyo imprescindible, aunque para las autoridades significa "trabajar el doble". "En uno de los últimos casos ocurridos en Zaragoza recibíamos avisos de que la persona estaba al mismo tiempo en dos sitios distintos, y nuestra obligación es comprobarlo", explican.


También existen casos de desaparición voluntaria. "Ha ocurrido alguna vez el localizar a una persona en paradero desconocido y que afirme que está muy bien y no quiere regresar a casa". En esos supuestos tan solo se notifica a los familiares o allegados que la persona está bien. 


En opinión de la Policía Nacional, no hay un auge de desapariciones sino "una mayor concienciación social ante el hecho de que denunciar es imprescindible" y aseguran que la cifra negra de denuncias no declaradas ha descendido de manera considerable. Sin embargo, a pesar de que desde SOS Desaparecidos Aragón afirman que los cuerpos de seguridad hacen "todo lo que está en su mano acorde con los medios de que disponen, habría que crear un organismo que coordinara estos casos, se reuniera periódicamente y sirviese para unir fuerzas", explica. Por ejemplo, la foto de Victor Da Silva la vieron más de 300.000 personas en 48 horas en todo el mundo gracias a la difusión en redes sociales por parte de la asociación.

Un 2014 marcado por las desapariciones

Este mismo martes, la Guardia Civil daba con el cuerpo sin vida de Acacio Cester, vecino de Alcañiz de 79 años que llevaba en paradero desconocido varios días. También este mes de mayo, la Policía Nacional localizaba a la zaragozana María Ángeles Loriente, desaparecida en el entorno de La Fuente de la Junquera el 6 de mayo. La mujer, de 75 años, fue hallada en buen estado y trasladada a un centro hospitalario. Ese mismo día la Policía Nacional daba la voz de alarma por la ausencia de Jesús Doñágueda, de 83 años, en el municipio de Calatayud. A día de hoy todavía no hay noticias de él.


El año nuevo zaragozano comenzaba con otro misterio, el del joven Victor Da Silva, que, como explican desde SOS Desaparecidos, permanece en paradero desconocido hasta que se confirmen las pruebas de ADN que se están realizado a los restos humanos hallados el pasado 29 de abril en la carretera de Cogullada. Aunque todo apunta a que se trata del joven de origen brasileño cuya pista se perdió el día de Nochevieja.


Entre estos casos recientes, también permanecen algunos abiertos desde hace más tiempo, como el del vecino de Alfajarín Joaquín Arruga, de 76 años, desaparecido en setptiembre de 2013, o el de Francisca Navarro, vecina de Zaragoza de 70 años, vista por última vez en Santa Isabel en abril de 2011. Con este son cuatro los casos de aragoneses desaparecidos en la actualidad.