El rector de la UZ pide el fin de los recortes, que "ahogan" a la universidad

Los integrantes de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE) han preparado un manifiesto conjunto para exigir "la finalización de las medidas excepcionales que afectan al estudio, a la actividad docente y a la investigación". Unas medidas que, en palabras del rector de la Universidad de Zaragoza, Manuel López, "ahogan" al sistema universitario.

El texto ha sido leído de manera simultánea en diferentes ciudades españolas. El rector y el secretario general de la Institución, Juan Francisco Herrero, han sido los encargados de tomar la palabra en la capital aragonesa. Desde las escaleras del Paraninfo han instado al Gobierno central y a los diferentes Ejecutivos autonómicos a dejar de tomar "medidas de racionalización del gasto público en el ámbito educativo".

Los responsables universitarios han apuntado que "las normas presupuestarias han afectado a salarios, a los derechos laborales y a las expectativas profesionales de todos los empleados públicos y, por tanto, también a los de las universidades".

Otro aspecto que han abordado es el de las "consecuencias irreparables para muchos grupos de investigación" después de que las instituciones públicas hayan entendido "la I+D+i como un gasto y no como una inversión", algo que "contrasta con la política de países más avanzados".

Los rectores consideran "especialmente dolorosas y difícilmente justificables por su mínimo impacto económico, las medidas que afectan a los jóvenes".El incremento de los precios públicos de los grados y, muy por encima de ellos, el de los másteres, afecta, en su opinión, a las "posibilidades formativas de nuestros jóvenes en un momento especialmente negativo para el empleo".

En cuanto al acceso a la profesión académica, sostienen que se encuentra "cerrado" para ellos, salvo los "resquicios que dejan las insatisfactorias tasas de reposición. Estas cercenan las perspectivas de los profesores universitarios en su carrera académica y minan la motivación para la mejora permanente en docencia e investigación".

El comunicado hace especial hincapié en que "los precios públicos de matrícula en las universidades deben ser accesibles y razonables en todos los niveles formativos. Debe recuperarse el sentido de las becas y ayudas como garantes de la equidad. Debe volver la autonomía de gestión de la actividad docente e investigadora de las universidades. Debe ser posible que éstas configuren ordenadamente sus plantillas, con fórmulas de renovación y promoción ajustadas a su realidad y a su planificación estratégica".

Los rectores han concluido su comunicado señalando que, "la universidad española, como toda la universidad europea, afronta necesidades de adaptación de su sistema a una realidad social y económica que exige una modernización de sus estructuras y funcionamiento. Para poder abordarla, es necesaria la búsqueda de un amplio consenso social y político que debe empezar forzosamente por la recuperación de la normalidad en su vida académica, docente e investigadora. La consecución de estos objetivos nos implica a todos -agentes sociales, gobierno, comunidades autónomas y universidades- y es necesario conseguirlo en beneficio de la sociedad española".

Tras la lectura, López ha explicado, en declaraciones a los medios de comunicación, que el manifiesto se ha enviado a todas las universidades españolas y ha deseado que se haya leído en muchas de ellas. Con él, los rectores quieren "que, por favor, nos presten atención" puesto que "los daños que se producen en un sistema como el universitario causan un efecto a largo plazo y queremos advertir con seriedad de lo que está pasando".

En este sentido, ha remarcado que la universidad española en su conjunto "es la que más colabora a la construcción de un futuro de innovación tecnológica, de especialización inteligente, como marca el horizonte 2020 europeo, donde se está construyendo el futuro de España, en su formación de mayor capacidad, en su investigación e innovación tecnológica".

Por eso, ha reclamado a la clase política española y también a quienes optan a ser eurodiputados en las próximas elecciones del 25 de mayo que "consideren qué puedan hacer por la situación española" de la universidad ya que "es en Europa donde se realiza la política que afecta a visiones estratégicas".

Problemas 

López se ha referido a los principales problemas que aquejan a la universidad española fruto de las "muchas medidas que han ido acumulándose" en materia de financiación, "recortes de investigación" y "subidas de tasas, muy particularmente las de másteres, que ha afectado de forma importante a la atracción de estudiantes en este sector".

Sobre las becas, si bien ha reconocido que "han aumentado los presupuestos" y "es de agradecer", "nunca hemos entendido ni estado de acuerdo en que se haya producido una diferencia entre la nota de acceso a la universidad, que es un 5, y el requerimiento para pedir una beca", fijado en un 5,5, ha apuntado.

Por otra parte, ha alertado de que la aplicación de la tasa de reposición "afecta profundamente a los jóvenes profesores e investigadores" ya que solo se puede cubrir el 10 por ciento de las plazas permanentes que han dado baja, lo que están suponiendo que "los jóvenes que después de realizar su periodo postdoctoral podrían tener acceso a contratos permanentes y no lo tengan".

"Esta medida producirá un efecto grave a nivel estratégico, de profundidad a lo largo de los años al sistema universitario" puesto que "hablamos del sector de mayor talento" y que "formará la base del profesorado y de los investigadores del futuro de la universidad".

Como ejemplo, ha indicado que en la Universidad de Zaragoza este año se han jubilado cerca de 30 profesores e investigadores, de forma que en aplicación de la tasa de reposición se podrán convocar tres plazas, "cuando debemos estar entre 15 y 20 profesores que han acabado su formación postdoctoral" y en otras circunstancias accederían a esas plazas.