El déficit en sanidad y educación se disparó en 2013 en más de 230 millones

A pesar del desfase, el gasto sanitario
se recortó sustancialmente respecto a 2012.

El déficit en sanidad, servicios sociales y educación se disparó en más de 200 millones de euros en 2013. Estos departamentos gastaron respectivamente 174 y 58 millones más de lo que habían presupuestado inicialmente, según la ejecución del pasado ejercicio. Sin embargo, pese a este exceso de gasto, las cifras en el caso de sanidad y servicios sociales se situaron por debajo de las de 2012. Solo en el Salud –concentra prácticamente todo el gasto sanitario de la Comunidad– se recortaron 387,6 millones de euros respecto al ejercicio anterior, fundamentalmente en gasto corriente (material y suministros). El Ejecutivo autonómico achaca este ajuste a que en 2012 se habilitaron mayores partidas para pagar las facturas pendientes (400 millones), que no se mantuvieron en 2013, y a los gastos pendientes de imputar al presupuesto.


Pero ¿de dónde procede el desfase de gasto en sanidad y educación respecto a lo previsto inicialmente? En el caso del primer departamento, el montante más importante (124 millones) tiene su origen en la cuenta 409, la conocida como ‘facturas en los cajones,’ puesto que se trata de gastos que no se han imputado al presupuesto, es decir, que están pendientes porque no hay partidas suficientes. A esta cifra hay que sumar 50,5 millones más del presupuesto de Sanidad y Bienestar Social, una cuantía que superó a finales de año las previsiones iniciales (1.867 millones).


El mayor incremento se localiza en las transferencias corrientes (farmacia) donde se registró un desfase de 59,3 millones. Por contra, hubo menos gasto de lo presupuestado en personal, transferencias de capital y gasto corriente. No obstante, si se analiza solo el Servicio Aragonés de Salud destaca el ajuste en materiales y suministros, donde se dejaron de gastar 39,7 millones. Precisamente, a finales de año se denunciaron casos de desabastecimiento en los hospitales que el Ejecutivo autonómico negó. También se redujo la inversión en 15,2 millones. Por contra, se sobrepasaron las previsiones en personal (39,9 millones más) debido al abono de la paga extra de diciembre y en el gasto farmacéutico que se abona a través de este organismo (31,6 millones).


Desde la Consejería de Sanidad insistieron en que más gasto «no significa mejor servicio» para tratar así de minimizar las críticas de recortes. Es más, insistieron en las medidas de eficiencia aplicadas: la central de compras ha permitido ahorrar desde 2011 unos 7 millones; la negociación de la oxigenoterapia, un 30%, además de otras iniciativas de los gestores de hospitales y centros de salud. «Todo sin que lo notara el paciente ni su calidad asistencial», justificaron fuentes de Sanidad. No obstante, a la vez, argumentaron que el exceso de gasto respecto a las previsiones iniciales del presupuesto demuestra que no hay recortes. Sí evidencia la infradotación de determinadas partidas.

Presupuesto insuficiente

Por su parte, en la Consejería de Educación, Universidad, Cultura y Deporte también queda patente –según la ejecución presupuestaria del Gobierno de Aragón de 2013– que el presupuesto inicial resultó a final de año insuficiente para afrontar todos los gastos. La previsión inicial de 912,1 millones acabó en 970,2 en diciembre del año pasado. Y la mitad de este desvío se produce en el personal, donde se registró un desfase de 32 millones de euros. Hay que recordar que en octubre ya se aprobaron modificaciones de crédito para hacer frente a nóminas de noviembre y diciembre porque no había dinero.


También se superaron las previsiones en gasto corriente, subvenciones y conciertos e inversiones. Fuentes de Educación explicaron que esto se debe a que se «está cumpliendo el compromiso de no recortar interinos». Al contrario que en Sanidad, si se compara el gasto final respecto al ejercicio anterior, se comprueba que en educación se produjo un incremento en 2013 de 2,4 millones de euros.