El Justicia insta a adaptar las salas de cine para personas con movilidad reducida

Un estudio de CERMI destaca la escasa accesibilidad de las salas zaragozanas.

Interior de una sala de cine zaragozana
El Justicia insta a adaptar las salas de cine para personas con movilidad reducida

Viejos o nuevos, los cines de Zaragoza son poco accesibles. Así lo determina un estudio de el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) recogido por el Justicia de Aragón, que insta al departamento de Sanidad a que haga cumplir la ley autonómica en materia de accesibilidad y eliminación de Barreras.


El informe destaca que ni siquiera los últimos cines construidos en la ciudad gozan de una adaptación adecuada para el colectivo de minusválidos. Cabe señalar, por ejemplo, que los últimos cines en aterrizar en la ciudad, los de Puerto Venecia, carecen de plazas reservadas para discapacitados. Estos deben colocarse delante de la primera línea de butacas.­


Esta ubicación, explican desde Cermi, no es la más adecuada: "Te ponen en la primera fila y no puedes ver la película bien, sales con tortículis de forzar el cuello y la vista".


Por su parte, los Aragonia cuentan con ascensor, hall y entrada entrada accesibles, pero de sus 16 salas apenas dos están adaptadas. Los otros cines más jóvenes, los de Plaza Imperial disponen de un porcentaje de salas adaptadas similar. "¿Qué ocurre si quieres ver una película que se proyecta en una sala no adaptada?", plantean esde la organización.


Tanto las normas autonómicas como la ordenanza municipal centrada en la accesibilidad determinan que las salas de cine son espacios privados pero de interés público y cultural, por lo que deben estar sujetas al cumplimiento de las condiciones de accesibilidad y ofrecer unas plazas mínimas.