La juez espera el informe forense para imputar falta o delito a los agresores del hijo de Agapito
Según el parte de Urgencias, el joven encajó un puñetazo en la cara que
le movió un diente, por lo que podría pedirse prisión para sus dos atacantes.
La juez que investiga la agresión sufrida el pasado fin de semana por el hijo del presidente del Real Zaragoza, Agapito Iglesias, ya ha recibido el parte médico que emitieron los facultativos que asistieron a la víctima en el servicio de Urgencias del Hospital Clínico. Según estos, el joven, de 24 años, presentaba lesiones en la cara y en las rodillas, ya que además de recibir algún puñetazo en el rostro pudo ser arrastrado por el suelo. En cualquier caso, la mayoría de las heridas no eran graves y no precisó de hospitalización.
Sin embargo, al explorar al paciente, los médicos apreciaron que se le movía demasiado uno de los dientes y relacionaron esta lesión con los golpes encajados. Por ello, la instructora de las diligencias va a esperar a que se pronuncien los forenses del Instituto de Medicina Legal de Aragón (IMLA) para valorar si imputa a los atacantes una falta o un delito de lesiones. La cuestión no es baladí, ya que si finalmente se califican los hechos como delito, los agresores –a los que se vincula con los radicales del Real Zaragoza– podrían enfrentarse a una condena de entre seis meses y tres años de prisión. Por el contrario, si la jueza considera que estas lesiones no revisten entidad suficiente, la pena a imponer no pasaría de una multa.
Parece que el hijo del presidente del Real Zaragoza no será visto por los forenses hasta después de Semana Santa, por lo que habrá que esperar algunos días para conocer la decisión de la instructora.
«¿Es que no lo conocéis o qué?»
La agresión, de la que informó ayer HERALDO, se produjo en la madrugada del 4 al 5 de abril. Según fuentes de la investigación, el hijo de Agapito Iglesias se encontraba a las 6.00 con unos amigos en la sala Mile End, en la calle de Héroes del Silencio de Zaragoza, cuando varios jóvenes se dirigieron hacia el primero y empezaron a empujarle. Al percatarse del incidente, el personal de seguridad del local intervino y sacó fuera a los agresores. «¿Es que no lo conocéis o qué? Es el hijo de Agapito», dijeron estos a los porteros, que les reprocharon su actitud y colaboraron después con la Policía.
Fue una amiga de la víctima quien llamó al 091 e informó de la agresión, lo que permitió que varios coches patrulla se presentaran en el establecimiento e identificaran a los atacantes. Según denunció el hijo de Agapito, después de la intervención policial sufrieron una segunda agresión, tanto él como uno de sus amigos, que trató de mediar y también ha presentado parte médico.
