El tráfico de camiones baja un 10% en dos años

La crisis también se nota en el tráfico de las carreteras aragonesas. Así lo ponen de relieve las estadísticas de tráfico de vehículos pesados elaboradas de forma anual por el Ministerio de Fomento. Los datos reflejan, por ejemplo, que por vías como la N-II o la N-232 circularon el año pasado entre 800 y 1.000 camiones menos que dos años antes. Estas cifras se traducen en una caída media del tráfico del 10%, aunque en algunas vías la bajada del trabajo es aún más acentuada. 

Las asociaciones que agrupan a las empresas de transporte y a los trabajadores autónomos confirman la caída de la actividad y lamentan la situación que vive el sector desde que comenzó la crisis económica. "El transporte es un instrumento al servicio de la economía. Si esta cae, el transporte también. En la misma medida, o incluso más", valora Fernando Viñas, secretario de la Federación de Empresas de Transporte de Mercancías de Zaragoza (FETRAZ). 

Desde la Asociación Empresarial de Transportes Discrecionales de Mercancías de Aragón (Tradime-Aragón) señalan que tienen contabilizaba una caída del transporte de mercancías del 14% y aseveran que no solo la crisis ha mermado la actividad de los transportistas.

La subida del precio de la gasolina en los últimos años tampoco ha hecho ningún bien al sector, según señala María José Pardo, gerente de Tradime-Aragón, es otro factor a tener en cuenta.

"Los gastos de combustible suponen el 40% de los costes totales de explotación de los transportistas, por lo que las subidas han afectado mucho al sector", señala por su parte Fernando Viñas.

Además, medidas como el céntimo sanitario, declarado ilegal por la UE, han agravado aún más las consecuencias del aumento de precios. Desde Tradime dicen que Hacienda tendrá que devolver en torno a seis millones de euros cobrados a los transportistas aragoneses de forma ilegal entre los años 2010 y 2012.

"Hay autónomos a los que tienen que devolverles, fácilmente, 4.000 euros, pero la verdad es que desde la Administración solo ponen trabas para que los transportistas recuperen este dinero", añade sobre este asunto María José Pardos.

Pero la lista de desdichas del sector del transporte no acaba ahí. Falta de crédito para empresas y autónomos, competencia desleal, una legislación que entorpece el trabajo de estos profesionales... La gerente de Tradime-Aragón enumera todas estas circunstancias negativas y sobre todas ellas cita a la llamada euroviñeta que quiere instaurar Cataluña a partir del próximo 2 de septiembre.

Se trata de un impuesto ecológico que quiere cobrar la Generalitat a los vehículos pesados (en concreto de más de 12 toneladas) por transitar por la carretera C-25, que discurre entre Lérida y Gerona.  

De llegar a aplicarse, la euroviñeta supondría la estocada al transporte de mercancías aragonés que desde 2008, según los datos que maneja Tradime, ha perdido 40.000 autónomos y unas 750 empresas. 

Como posibles soluciones a esta situación, el secretario de Fetraz propone mejorar la legislación, que las empresas se agrupen para hacerse más competitivas o que se vigile más el precio de los combustibles desde la Administración, entre otras medidas. Pero Fernando Viñas es tajante: "Hasta que la economía no se reactive el transporte en España no se recuperará del todo".