La Unión Europea (UE) aprobó este lunes nuevas normas para proteger los derechos de trabajadores no comunitarios que llegan a territorio de la UE para trabajar como temporeros y que, en ocasiones, sufren explotación.

La directiva, que ya había sido acordada con el Parlamento Europeo y aprobada en sesión plenaria en la Eurocámara, fue aprobada este lunes como punto sin debate en el marco del Consejo de Ministros europeos de Agricultura que se celebra en Bruselas.

Los Veintiocho tendrán dos años para adaptar la legislación nacional a la nueva normativa, a contar a partir de su publicación en el Diario Oficial de la UE.

Según datos de la Comisión Europea (CE), alrededor de 100.000 temporeros no comunitarios llegan a la UE cada año para trabajar durante unos meses.

Entre las mejoras que supondrá la normativa, figuran la obligación de que estos trabajadores tengan un contrato, desarrollen su labor de forma digna y tengan los mismos derechos laborales y convenios que los trabajadores con pasaporte de la UE.

Además de proteger a los temporeros de la explotación, la directiva incluye salvaguardas para evitar que estos trabajadores se conviertan en permanentes y reserva el derecho de los países a determinar cuotas de admisión y a rechazar solicitudes si hay trabajadores comunitarios disponibles.

Esta legislación fue impulsada por la CE en 2010 tras protestas y revueltas sociales protagonizadas por temporeros en Italia y España.