Fogasa tarda hasta un año en pagar a los despedidos por cierre en Aragón

Más de 12.600 trabajadores fueron indemnizados en la Comunidad el año pasado. En 2007 apenas fueron 3.000.

Protesta de los trabajadores de Fogasa por falta de plantilla
Fogasa tarda hasta un año en pagar a los despedidos por cierre en Aragón
Archivo HA

El Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) está saturado de trabajo. La crisis económica ha disparado en número de conflictos entre empresas y empleados que se ven en la calle tras un cierre abrupto por declaración de insolvencia o concurso de acreedores. Y este organismo es el encargado de abonar los créditos salariales e indemnizaciones pendientes de pago.


El año pasado, Fogasa tramitó en Aragón 8.104 expedientes por el cierre de 4.453 empresas, en los que se vieron involucrados 12.634 empleados (8.500 hombres y 4.000 mujeres). Según estas cifras facilitadas por el Ministerio de Empleo, el número de casos se ha incrementado levemente en relación al 2012, cuando se vieron afectados 11.707 trabajadores.


De hecho, en los últimos años la tendencia ha sido creciente y continua. En 2007, justo antes del comienzo de la crisis, apenas 3.000 aragoneses tuvieron que pasar por este trámite. Sin embargo, tal y como denuncias fuentes sindicales, Fogasa mantiene la misma plantilla para un ?volumen de expedientes muchísimo mayor?.


Como consecuencia, el retraso en el pago de las indemnizaciones y de los salarios pendientes alcanza los doce meses en Aragón. Y no es el peor escenario, ya que en otros territorios deben esperar casi dos años hasta recibir el dinero.


?La situación de estas personas, que están sin empleo ni sueldo, es muy precaria?, explica José de las Morenas, secretario de Política Industrial y Salud Laboral de UGT-Aragón. ?La Administracion incumple sus propios plazo por falta de recursos humanos?, critica.


Además, asegura que en la actualidad hay todavía en la Comunidad más de 200 expedientes bloqueados. Por todo ello, tanto UGT como CC.OO van a iniciar una serie de movilizaciones de protesta, entre ellas una concentración el próximo día 13 de febrero.


Falta de liquidez

Pero los problemas de Fogasa no son solo relativos a recursos humanos. El año pasado el Gobierno central aprobó un presupuesto inicial para el pago de indemnizaciones de unos 840 millones de euros, que se gastaron antes de acabar el verano.


Finalmente se hizo una ampliación hasta los 1.373 millones desembolsados a lo largo de todo el 2013. Aún así, este es el primer año que se reduce el importe final que sale de las arcas públicas, pese a que el número de afectados ha crecido. Unos salarios más bajos que hace unos años y coberturas menores por parte de Fogasa, han propiciado este 'ahorro'.


En Aragón, el gasto final de este año se ha quedado en 55,1 millones de euros, repartidos entre salarios pendientes (15 millones) e indemnizaciones (40). frente a los más de 61 del año anterior.