El sector cultural aragonés perdió 366 trabajadores cada mes del año pasado

El mundo de la cultura lleva meses advirtiéndolo: la crisis está dejando en jaque al sector. A muchas familias no les salen las cuentas para adquirir productos culturales, el IVA subió varios puntos en septiembre de 2012, cada vez más empresas se ven abocadas al cierre... Todo ello se ha traducido en despidos en el sector que, según el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, alcanzaron la cifra de 4.400 personas solo en Aragón.

Este dato sitúa a la Comunidad aragonesa entre las que más empleo cultural destruyeron en 2012, solo por detrás de Cataluña y Andalucía, ambas con mucha más población que Aragón (algo más de 7,5 millones de personas la primera y 8,4 la segunda por los 1,3 de Aragón).

Desde la plataforma '+Cultura', que aglutina a más de 30 asociaciones y fundaciones culturales, consideran que "estos datos serán aún más graves cuando se publiquen los datos relativos al 2013, ya que las variables de inversión económica de las administraciones y el gasto en cultura por habitante en nuestra comunidad mantienen una tendencia constante a la baja".

La crisis se ha revelado como una de las mayores enemigas de la cultura. Por un lado, la falta de financiación pública ha anquilosado las iniciativas y la oferta cultural. Por otro, ha apartado a los ciudadanos de las librerías y les ha alejado del cine, los conciertos y los teatros. 

Según el anuario de la SGAE, correspondiente al año 2012, los espectadores de artes escénicas cayeron un 31,4% en los últimos cinco años mientras que la venta de entradas de cine registró un descenso de casi el 11%. Solo en Aragón, las salas de cine perdieron a lo largo del año pasado 140.000 espectadores.

Precisamente 2012 fue el año del adiós de los Cines Renoir. Las siete personas que trabajaban en estas salas fueron despedidas. Sergio Casado es uno de ellos. Convencido del pilar que suponían los Renoir en la vida cultural de muchos aragoneses inició junto a dos de sus compañeros una iniciativa para recuperar en Zaragoza una sala de cine independiente, como se hizo con los Renoir de Palma de Mallorca. 

"Seguimos trabajando para mantener la llama de los Renoir. Pero lo tenemos muy difícil porque apenas hemos recibido apoyo institucional y nuestros recursos económicos son limitados", explica el propio Sergio, desempleado desde que cerraron los cines. 

Sergio admite que la cartelera de cine en la capital aragonesa "se ha empobrecido" y admite, con pesar, que muchas películas interesantes nunca llegarán a Zaragoza.

"Es un hecho que Zaragoza ha perdido fuelle cultural en los dos últimos años, no solo por el cierre de cines, también por los recortes en las bibliotecas y también en la Filmoteca", lamenta Casado.

En el mundo editorial el panorama no es mucho mejor. Joaquín Casanova, presidente de la Asociación de Editores y Distribuidores de Fondos Propios de Aragón, explica que la crisis y el miedo al consumo --por si la situación económica, lejos de ir mejorando como se viene oyendo desde hace meses desde diferentes sectores, empeora--  están lastrando las ventas. "Hay un menor consumo de casi nada. El poder adquisitivo manda y nuestro sector es uno más", afrma Casanova.

Las cifras de ventas y la reducción de ayudas públicas "a cifras testimoniales", según Casanova, han dejado al sector en una situación "de liquidación total" y han hecho que las cuentas de muchas editoriales no cuadren por ningún lado y hayan tenido que hacer ajustes de personal.

Con 9.200 trabajadores culturales censados en 2012, 4.400 menos que en un año antes (en 2011 el Ministerio tenía registrados 13.600 aragoneses que trabajaban en el ámbito cultural), la cifra de empleados del sector se sitúa a niveles de hace una década.

La situación en España: 24.100 empleos perdidos

En España, el 2012 no fue mucho mejor que en Aragón. De los 481.700 trabajadores dedicados a la cultura registrados en 2011, el año pasado solo quedaban 457.600, lo que supone un descenso de 24.100 empleados.

El total de empresas cuya actividad económica principal es la cultura ha pasado de 103.320 a 101.342 en el mismo periodo, aunque la aportación al PIB de las actividades culturales solo ha caido una décima (del 2,8 al 2,7%).

A nivel autonómico, el gasto cultural pasó de los 1.769 millones de euros de 2011 a los 1.483 millones de 2012. El recorte de los ayuntamientos españoles también fue considerable: pasó de 4.043 millones a 3.397.