Medio Ambiente

La Plataforma en Defensa del Ebro dice que el PP busca liberalizar mercado del agua

La organización critica que la reforma legal que los populares intenta introducir permitirá que las propuestas de trasvase no pasen por el consejo de Ministros.

La Plataforma en Defensa del Ebro (PDE) ha alertado este martes en Tortosa de la intención del Gobierno del Partido Popular de utilizar diferentes mecanismos legales para liberalizar el mercado de agua entre cuencas fluviales.


La organización antitransvasista ha informado de la inminente tramitación en el Senado de la Ley de Evaluación Ambiental, una ley que incluye dos enmiendas del PP que permiten una gestión del agua al margen de los Planes de Cuenca.


"Esto supone que cualquier propuesta de trasvase no se verá obligada a pasar por el Consejo de Ministros, sino que bastará con un acuerdo entre usuarios", ha dicho Susana Abella, portavoz de la Plataforma.


La PDE ha informado también de que los usuarios del río, es decir, las comunidades de regantes, pasarían a estar gestionadas por un organismo regulador, de titularidad pública o privada, que sería el principal interlocutor en estas decisiones.


Ante este hecho, la PDE ha enviado una carta a los senadores catalanes, especialmente a los representantes en la cámara baja de las Terres de l'Ebre, el socialista Joan Sabaté y el convergente Ferran Bel, para que ejecuten distintas enmiendas para evitar que salga adelante esta modificación de la Ley.


"No queremos que los senadores catalanes sean cómplices de esta ley", ha dicho Abella, que ha asegurado que el mismo día en que se apruebe esta ley en Madrid se convocará por la tarde a la ciudadanía en Tortosa para anunciar el programa de las diferentes acciones reivindicativas, así como la XII Assamblea de la PDE, que probablemente, según esta organización social, se celebraría a principios de enero de 2014.


A pesar de las advertencias, la PDE se ha mostrado satisfecha de la reunión que algunos de sus miembros celebraron el pasado viernes con el representante del ministerio de Medio Ambiente en Madrid.


"No sentimos honrados de que por fin nos hayan aceptado como interlocutores", ha dicho Abella, que ha añadido: "no sabemos si es un cambio natural o inducido".